La asociación de jugadores pide no seguir echando leña al fuego
Sábado 24 de enero de 2015, p. a13
Los Ángeles.
La NFL confirmó que durante la final de la Conferencia Americana que los Patriotas de Nueva Inglaterra le ganaron 45-7 a Potros de Indianápolis, los ovoides estaban faltos de aire, fuera de las reglas.
Sin embargo, el organismo señaló que no ha concluido su investigación sobre este escándalo, al que la prensa ha bautizado como Deflategate (Desinflargate).
La información recopilada hasta el momento confirma que los balones utilizados por los Patriotas en el primer periodo del partido estuvieron poco inflados
, dijo la NFL en un comunicado.
No obstante, los usados en el segundo cuarto fueron infladas de acuerdo con la regulación, como lo demuestran los controles llevados a cabo después del partido
, agregó la liga.
La indagación, que comenzó el 18 de enero, el mismo día de la final de la conferencia que ganaron los Pats, se encomendó a uno de los vicepresidentes de la NFL, Jeff Pash, y al abogado Ted Wells.
Cerca de 40 personas han sido entrevistadas por los investigadores elegidos, incluido el personal de Nueva Inglaterra, los árbitros que dirigieron el partido y los expertos.
El propósito de las pesquisas es determinar por qué las pelotas utilizadas durante el juego no se ajustaban a la norma, sobre todo si se trata de una acción deliberada, pero todavía no hay conclusiones sobre estos puntos
, añadió el reporte.
La polémica ha robado protagonismo al próximo Supertazón 49, que jugarán el 1º de febrero en Phoenix (Arizona) los Patriotas y los Halcones Marinos de Seattle, campeones de la Conferencia Nacional y actuales de la NFL.
A cada equipo se le proporcionan 12 ovoides de futbol americano para un partido, todos supervisados por los árbitros antes del encuentro para que tengan los niveles de aire adecuados. Los balones quedan por lo general bajo el control de un administrador de equipo hasta que se necesiten.
Durante un juego, la unidad ofensiva de cada escuadra utiliza sólo las pelotas que le proporcionaron los funcionarios de la liga.
La NFL dijo el pasado lunes que había iniciado una investigación, sin confirmar que los balones proporcionadas por Nueva Inglaterra no estaban inflados de acuerdo con la regulación (entre 12.5 y 13.5 libras o 879 y 940 g/cm).
El entrenador de los Patiotras, Bill Belichick, y el mariscal de campo Tom Brady se defendieron la víspera de las acusaciones, pero sus declaraciones no convencieron a los aficionados ni a la prensa.
Mientras la Asociación de Jugadores de la NFL sugirió a Nueva Inglaterra no seguir echando leña al fuego
, la organización advirtió que la investigación está en curso; será exhaustiva y objetiva
.