El levantón de Moisés Sánchez
a desaparición del fotorreportero y activis- ta, Moisés Sánchez Cerezo revela no sólo inquietantes similitudes con el caso del levantón y homicidio de los normalistas de Atzoyinapa, Guerrero, sobre todo por las condiciones contextuales del municipio de Medellín y el papel que ejercía Moisés como voz pública y severo crítico a la actuación del alcalde de ese ayuntamiento.
Una de las líneas de investigación apuntan al edil, luego de trascender que éste habría amenazado a Moisés con darle un susto
tras las publicaciones que realizaba en el tabloide La Unión, en el que daba cuenta de las corruptelas del alcalde panista, Omar Cruz Reyes. Además, se suma la aparente corresponsabilidad en el hecho delictivo de la policía municipal, cuyos miembros han sido citados a declarar ante la PGJ y 13 de ellos se encuentra arraigados.
En esa región se han integrado grupos de autodefensa ante la inseguridad provocada por la delincuencia organizada, que tiene a la población de esa zona en inquietud y desazón. Luego viene la tardía reacción de las autoridades encargadas de dar seguimiento al caso y la lenta respuesta tanto de la policía como del Ejército, que llegaron más de media hora después de que un grupo de encapuchados lo sacara de su casa con violencia.
El paralelismo contextual resulta aún más perturbador cuando al igual que el ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, el panista Omar Cruz, sostiene su inocencia y propala su indignación por el secuestro de Moisés. Lo anterior habla de la reproducción en vastas regiones del país de vacíos de autoridad, ausencia de Estado y el fortalecimiento de poderes informales copados por delincuentes.
Moisés sigue sin aparecer en medio de rumores sobre su presunto homicidio y al mismo tiempo ha comenzado la estrategia de desprestigio, ahora con lo novedoso que resultan sus faltas de ortografía, su ausencia de formación académica y su oportunista
inserción en el prestigiado oficio de periodista. En el viaje hubo otro damnificado. La jefa de información del diario Notisur, Sayda Chiñas Córdoba, fue despedida por demandar la aparición de Moisés.