La gran contradicción

a noticia de que México se podría convertir en importador de petróleo, siendo el noveno país exportador, suena absurda. Al país que le compraría sería Estados Unidos, al que le ha estado exportando grandes cantidades de petróleo crudo, materia prima de la que sin de la que sin duda se beneficia, pues ellos sí le sacan provecho al darle valor agregado, mientras nuestro país no ha podido o querido aprovechar de manera precisa la oportunidad para desarrollar la industria nacional y crear nuevas refinerías, que vendrían a disminuir la tasa tan alta de desempleo que existe.

Estados Unidos planeó durante años convertirse de un país importador en exportador de hidrocarburos, pero sin tocar sus reservas, pensando en que algún día ya no habría ese energético fósil, el cual querían asegurar estratégicamente.

Acumuló tanto petróleo que ha provocado la sobrexplotación de este producto y generando que los precios bajen, causando daños severos a los países exportadores a gran escala, entre ellos México, Venezuela, Brasil y Rusia.

Nuestro país mantuvo su economía basada en el petróleo, fue su principal bastión y palanca de desarrollo, al menos eso se pensaba antes de que hicieran la reforma energética los neoliberales en turno. El imperialismo estadunidense presiona para colocar sus exportaciones a precios muy bajos perjudicando a los demás productores, sobre todo a Rusia, Venezuela y México.

Tal vez sea necesario que México, al igual que otros países, dejase de ver el petróleo como base de su economía y se enfocara en sustituirlo con otros productos, al mismo tiempo que diversifica su comercio y entra a una etapa de sustitución de energías fósiles contaminantes por energías renovables limpias.

El comerciar diversificando las divisas basadas en patrón oro sería el siguiente paso.

Luis Langarica Arreola

Sobrino de Alejandro Gómez Arias corrige información

El día de ayer, 8 de enero, aparece en el reportaje de Blanche Petrich sobre don Julio Scherer un comentario equivocado cuando se refiere a Alejandro Gómez Arias, pues dice que en su enfermedad terminal había perdido la lucidez, lo que nunca ocurrió. La muerte de Alejandro Gómez Arias se debió a un accidente y no a una enfermedad; internado en el hospital, y en mi presencia, lo visitó don Julio Scherer y conversaron normalmente.

Gómez Arias, unos días antes de su accidente, había entregado a la revista Siempre! su artículo quincenal, con la misma calidad que le caracterizó toda su vida. Un día antes de morir, a un amigo que lo visitó le comentó con gran valor y lucidez que estaba aprendiendo a morir.

Alejandro Gómez Arias murió en presencia de su querida esposa Teresa Salazar Mallen y un servidor, su sobrino; con tranquilidad y sin perder nunca su extraordinaria lucidez.

Enrique García Formentí Gómez

Respuesta de Blanche Petrich

Me apena muchísimo haber provocado malestar en la familia de Alejandro Gómez Arias, descrito en sus días finales en la semblanza que escribí sobre don Julio Scherer. La versión que cito la tomé del testimonio directo de Vicente Leñero en el libro Los maestros, editado por la Fundación Nuevo Periodismo.

No tengo ningún motivo para poner en duda lo que refiere Enrique García Formentí Gómez, sobrino de Gómez Arias, en su carta. Por el contrario, agradezco que aporte esa luz de su propio recuerdo, seguramente certero, sobre la lucidez de don Alejandro, aunque opuesto a lo que rescata de ese momento la memoria de don Vicente.

Le ofrezco una sentida disculpa.

Blanche Petrich

Charlie Hebdo y su relevancia en México

Vale la pena mencionar que los dibujantes de Charlie Hebdo (publicación de sátira semanal) son legendarios, sobre todo Cabu y Wolinski, quienes conocían bien México, eran también escritores y críticos feroces de todos los sistemas políticos, no hubo tema del cual no escribieran y dibujaran, pero su combate era a través del humor.

Geniales en el trazo y poderosos en ideas; la manera de ridiculizar los dogmas religiosos les valió amenazas de los fanáticos del islam, quienes hoy cumplieron su amenaza. El mundo pierde a cuatro dibujantes excepcionales de una extraordinaria inteligencia crítica, que tanta falta hace en este momento.

Quizá en este momento el sub Marcos y sus compañeros del EZLN recordarán cuando hace años un equipo de dibujantes y periodistas de Charlie Hebdo, entre ellos Tignous (uno de los asesinados), le hicieron una entrevista memorable; lo dibujaron (el Sub hizo su autocaricatura) y publicaron varios artículos sobre el zapatismo, que le dieron (para el lector europeo) una cara diferente a la guerrilla: simpática, amable, generosa, llena de poetas y apasionados de la vida y de la libertad, pero dirigida por un mal dibujante...

Jorge Sánchez

Solidaridad del IIEc con padres de Ayotzinapa

La comunidad del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM reitera su solidaridad con los padres de los estudiantes de Ayotzinapa, quienes exigen la revisión de las instalaciones militares. Rechaza cualquier forma de represión contra los distintos movimientos sociales que se manifiestan en todo el país y se solidariza con el investigador Jorge Antonio Montemayor del Instituto de Física de la UNAM, quien está recibiendo amenazas porque demanda información de las actividades de la zona militar número 27 en esos días aciagos.

Se invita a la comunidad universitaria a mantener viva la resistencia y participar en la manifestación del 26 de este mes.

Por la comunidad del IIEc: Raúl Ornelas, Maricela Peralta, Ana María Aragonés, Estela Ramos Vázquez, Gunnar Wolf, Ana I. Mariño, Alejandro López y Josefina Morales

Invitaciones

Charla con Pedro Miguel

El Colectivo Tendedero Político invita a la charla Ayotzinapa y el proceso electoral, con Pedro Miguel, columnista de La Jornada, este sábado a las 16 horas en Madero e Isabel la Católica, en contra esquina del Museo del Estanquillo, en el Centro Histórico de la ciudad de México.

Samantha Fouilloux.

Curso de oratoria

Curso de oratoria para jóvenes de 12 a 30 años; inicia hoy viernes 9, de las 16 a las 19 horas, en el Club de Periodistas de México, ubicado en Filomeno Mata número 8, Centro Histórico. Es gratuito. Informes al: 55 39 11 43 86. Responsable: licenciado Bernal.