La denuncia de una probable ejecución sumaria acaecida el pasado 30 de junio en el municipio de Tlatlaya, estado de México, ‘‘es un hecho grave de descomposición política y de las instituciones del Estado’’, denunciaron los coordinadores parlamentarios del PRD, Miguel Alonso Raya, y de Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal.

La integración de un grupo plural de diputados que investigue los sucesos descritos se postergó para la semana próxima por acuerdo por la mayoría de los coordinadores parlamentarios en San Lázaro.

Para Alonso Raya, el riesgo de no abundar en la aclaración de los hechos denunciados ‘‘puede conducir a encontrarnos con otro suceso como el de Aguas Blancas (perpetrado por asesinos a sueldo contra campesinos en el estado de Guerrero). Es un asunto sumamente delicado que debe aclararse; no puede mentírsele a la sociedad porque ya se han involucrado organismos internacionales como Human Right Watch y el propio gobierno de Estados Unidos’’.

El político guanajuatense consideró que el grupo de trabajo propuesto por el PRD en San Lázaro debe contribuir a la investigación seria y a fondo que realice la autoridad judicial. ‘‘Se tendrá que seguir todo el protocolo y las medidas necesarias –con los procesos científicos que se requieran– para ilustrar a la sociedad qué fue lo que realmente aconteció’’.

Se consideraba al inicio de la sesión de ayer que el grupo de trabajo de diputados sería constituido por el pleno camaral, de acuerdo con lo establecido por los coordinadores parlamentarios de todos los partidos. No obstante, la integración de la comisión legislativa se postergó para la próxima semana.

Alonso Raya recordó que los procedimientos extrajudiciales se desataron desde que Felipe Calderón Hinojosa declaró su ‘‘guerra’’ contra el crimen organizado. ‘‘En este caso tendrá que develarse la verdad, no hay otra alternativa; no veo además otra forma de evitar que se oculte, porque estamos frente al escrutinio extranjero’’.

‘‘Escuadrones de la muerte’’

Por su parte, Ricardo Monreal expuso que en el caso de Tlatlaya ‘‘se manifiestan indicios de la actuación de escuadrones de la muerte prohijados por las autoridades. ‘‘Lamentablemente todos los escándalos y actos de violencia que concluyen en homicidios han sido ignorados por la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Ese organismo rechazó en un principio investigar el caso Tlatlaya y ahora que los medios nacionales y extranjeros abren la investigación se ve obligada a seguir el caso’’.

El legislador zacatecano calificó de ‘‘muy grave’’ el contenido de la denuncia, porque ‘‘manifiesta un estado de descomposición social y se requiere un proceso de renovación de la sociedad en todos sus ámbitos para poder alcanzar un entorno digno y de justicia’’.