Los Diablos Rojos seguirán en la ciudad de México y buscarán una sede temporal, porque en 2016 construirá su nueva casa en la Magdalena Mixhuca, con capacidad para 12 mil espectadores, anunció Alfredo Harp Helú, dueño de la novena.

Afirmó que los Diablos Rojos no se irán de la capital y por medio de la fundación que lleva su nombre obtendrán los recursos para la construcción del inmueble, además de que contará con apoyo gubernamental.

Harp Helú ofreció una conferencia de prensa en la casa de los Padres de San Diego, donde se realizó el juego Diablos Rojos-Tijuana, aunque la noticia trascendió a través de las redes sociales.

El pronunciamiento de Harp Helú, quien desde hace cinco años tenía proyectada la construcción de un nuevo parque con la promesa de que el gobierno local cedería terrenos en Iztacalco, como lo reveló Roberto Mansur, presidente ejecutivo del equipo, se dio después del anuncio del regreso de la Fórmula Uno a México. Los organizadores del certamen de la máxima categoría automovilística anunciaron la remodelación del lugar, el cual incluía el estadio de Diablos Rojos.

Diablos ofrecerá a su público un digno recinto por estar con nosotros siempre, ésta es su recompensa, escribió en su cuenta de Twitter Jorge Alum Kahwagi, presidente corporativo y gerente general del conjunto capitalino.