Productos turísticos basados en las industrias creativas es la nueva tendencia que desarrollan los promotores turísticos para explotar una nueva veta de destinos, señala la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Este tipo de actividades, que incluyen sectores como publicidad, animación, arquitectura, diseño, filmes, gastronomía, música, televisión y radio, entre otras, relacionan a productores y consumidores para generar experiencias y bienes tangibles, dice el documento Turismo y las industrias creativas.

Relacionar a las industrias creativas con el turismo puede aumentar la demanda, estimular la innovación en experiencias turísticas, revitalizar sectores y productos turísticos, añadir atmósfera y destinos y mejorar la imagen de un lugar, dice este reporte recién publicado.

Desarrollar nuevas formas de turismo creativo involucra el uso de diferentes sectores y contenidos creativos, así como la aplicación de nuevas tecnologías, precisa.

Según la institución, esta clase de productos ha adquirido relevancia considerable en los años recientes, al grado de que el comercio de bienes y servicios de este tipo ha crecido a una tasa de 8.8 por ciento anual entre 2002 y 2011.

De esta manera, las industrias creativas estimulan el crecimiento económico y la creación de empleos, impulsan la innovación y el emprendedurismo, y estimulan las exportaciones.

La relación de beneficio mutuo entre turismo y cultura ha sido una de las mayores fuentes de crecimiento turístico en las décadas recientes, indica el documento.

Pero esta relación está cambiando, dado que antes había un énfasis en el patrimonio tangible y ahora la atención está basada en productos intangibles y creatividad contemporánea, explica.

Ejemplos de esto son la iniciativa de Austria Creativa, que agrupa a las ya de por sí turísticas ciudades de Viena, Graz, Salzburgo y Voralberg, y las involucra con la cultura contemporánea de arte, diseño y periodismo.

Otro caso es el de Milán, cuya atracción radica en todas las casas de diseño de moda que ahí se asientan y se complementan con muestras gastronómicas y de cine, además de una promoción constante mediante redes sociales y aplicaciones para dispositivos móviles.

Una más es Santa Fe, Nuevo México, donde aunado al entorno natural se integra la promoción de industrias a partir de tradiciones culturales, como las de nativos americanos y otras comunidades inmigrantes, que exponen su arte, al mismo tiempo que mantienen su historia e identidad.