El atacante del Liverpool superó la lesión y la cirugía a que fue sometido en mayo pasado
Cuando mejor jugaban los ingleses cayó el primer tanto charrúa
Los europeos no quedan fuera en la primera ronda desde 1958
Rooney marcó luego de 10 juegos en justas mundialistas
Viernes 20 de junio de 2014, p. 2
Sao Paulo, 19 de junio.
En un imprevisto regreso al espíritu del maracanazo de 1950, Uruguay venció 2-1 a Inglaterra con goles de un genial Luis Suárez en una tarde memorable y dejó al equipo europeo prácticamente eliminado del Mundial de Brasil 2014.
Suárez, justamente el goleador de la reciente Liga Premier inglesa y quien fue operado de los meniscos de la rodilla izquierda el pasado 22 de mayo, anotó los dos tantos de la primera victoria charrúa en el torneo y la primera sobre un equipo europeo en copas del mundo desde México 70.
El atacante del Liverpool adelantó a la celeste al minuto 38 con un estupendo cabezazo, tras un preciso pase de Edinson Cavani.
Wayne Rooney empató transitoriamente al 75, pero el Pistolero marcó el 2-1 definitivo a seis minutos del final.
Suárez, quien había sido relevado y estaba llorando en la banca, terminó el partido en andas de sus compañeros. No había jugado la fecha inicial del torneo por una lesión sufrida en la última fecha de la liga inglesa, el pasado 11 de mayo.
Inglaterra, que perdió ante Italia, podría quedar eliminada mañana después del partido que cerrará la segunda fecha del llamado grupo de la muerte entre Italia y Costa Rica, en Recife.
El equipo de la rosa, que no queda fuera en la primera fase desde el Mundial 1958, cerrará el bloque el próximo martes ante Costa Rica, sorpresivo vencedor de Uruguay en la rueda inicial. Los charrúas enfrentarán a la azzurra en Natal.
Desde el comienzo el partido se jugó con la tensión propia de un choque de eliminación directa. La vibrante atmósfera del estadio, lleno con 62 mil 575 aficionados, agregó más dramatismo a un juego en el que los dos equipos tenían que ganar.
Uruguay comenzó con los nervios de una selección que venía de perder inesperadamente contra Costa Rica y que presentaba cinco cambios. La buena noticia para los uruguayos era el regreso de Suárez, aunque al mismo tiempo tenían que convivir con la ausencia del capitán Diego Lugano, baja por lesión, y remplazado por José Giménez, un joven de 19 años.
La celeste consiguió equilibrar el juego hasta la media hora y tuvo una aproximación de serio riesgo con un disparo cruzado de Cristian Rodríguez que Joe Hart vio pasar por encima del travesaño. Fue un lapso del primer tiempo en el que Uruguay le peleó la pelota en mitad de la cancha a Inglaterra, a través del buen trabajo en esa zona.
Entonces comenzó lo mejor de los ingleses, una superioridad que, fiel a los caprichos del futbol, desembocó en el gol uruguayo.
Los cuatro jugadores ofensivos de Inglaterra –Danny Welbeck, Raheem Sterling, Daniel Sturridge y el propio Rooney– eran abastecidos por los desbordes de los laterales Glen Johnson y Leighton Baines. Uruguay, en posición defensiva, estaba superado.
Rooney continuó por unos minutos más su maldición en los mundiales –hasta hoy no había convertido ningún gol luego de nueve partidos–, cuando un cabezazo del delantero del Manchester United se estrelló en la unión entre el palo y el travesaño.
Sin embargo, en ese momento llegó el primer gol de Suárez. Con Inglaterra adelantada, la escuadra charrúa aplicó el plan que más le gusta, el del contrataque, y al minuto 38 se puso en ventaja.
Nicolás Lodeiro jugó para Edinson Cavani y el delantero del Paris Saint Germain hizo la pausa para esperar que Suárez llegara al área. El pase fue perfecto y la definición con la cabeza del goleador del Liverpool todavía mejor; dejó sin reacción a Hart y definió el 1-0.
Impulsado por la ventaja, Uruguay comenzó el segundo tiempo con un par de situaciones para aumentar su diferencia. Suárez intentó hacer un gol olímpico –ya lo había probado en el primer tiempo– y casi lo consigue, pero Hart respondió muy atento. Casi enseguida Cavani quedó enfrente del portero del Manchester City, pero definió desviado.
Los ingleses, al borde de la eliminación, ganaron en desesperación y tuvieron una oportunidad muy clara que Muslera le ganó otra vez a Rooney.
Los minutos pasaban y Uruguay se resistía cada vez con más gente, hasta que al minuto 75 llegó el empate. La estadística dirá que el 1-1 fue marcado por Rooney, quien por fin cortó su maldición en copas del mundo con un remate en el área chica, pero el gran mérito correspondió al desborde previo de Johnson.
La igualada no le servía a Uruguay, que quedaba así con sólo un punto y debía vencer a Italia en la última fecha y esperar otros resultados.
Sin embargo, Suárez apareció con el oportunismo de los grandes y después de que Gerrard tocó hacia atrás un balón que caía del cielo en largo despeje de Muslera, superó a Hart con un violento remate de pierna derecha.
Ya no faltaba nada para el final de una vibrante jornada en el estadio Itaquerao que terminó con los hinchas uruguayos cantando volveremos a ser campeones como la primera vez
, en referencia al Mundial del 50.