Durango, Dgo., 2 de junio.

La organización Red Mujeres de La Laguna llamó al gobernador de Durango, Jorge Herrera Caldera, a que reinstale la policía municipal en Gómez Palacio y Lerdo, donde no existen corporaciones locales desde hace 18 meses.

A principios de enero de 2013, el Ejército Mexicano desarmó y detuvo a los 158 agentes de Gómez Palacio por presuntos vínculos con el narcotráfico. Desde entonces no hay policía municipal. Días después sucedió lo mismo con los 58 uniformados de Lerdo, aunque en este caso no hubo detenidos.

Desde entonces, los patrullajes en esas localidades de la Comarca Lagunera están a cargo de elementos de las fuerzas armadas y efectivos de la policía estatal preventiva.

En una carta, la red pidió al mandatario realizar las gestiones necesarias para restaurar en los municipios mencionados el orden civil, pues si bien los crímenes de alto impacto van a la baja, el derecho de las mujeres a la seguridad aún no está garantizado.

Luego de la detención de un presunto violador que había atacado a varias mujeres de Gómez Palacio y Lerdo –algunas de las cuales ya lo han identificado–, el jueves pasado en Torreón, Coahuila, el organismo pidió a las autoridades municipales incluir en sus planes de gobierno la atención a la violencia contra las mujeres.

Expusieron que la violación de casi 50 mujeres en la región lagunera de Durango y de 14 cometidas en Torreón, además de los ataques sexuales que no son denunciados, demuestran la carencia de una estrategia de seguridad para este sector.

En Coahuila, un juez dictó auto de formal prisión a siete policías de Acuña, detenidos el 28 de mayo por presuntos vínculos con el cártel de los Zetas, al que presuntamente informaban de operaciones policiacas y militares. Los uniformados fueron recluidos en el penal de Piedras Negras.