El marchista Éder Sánchez volvió a levantar la voz para insistir en el desorden que prevalece en la caminata mexicana con el proyecto nacional, el cual, asegura, no funciona debido a su propia estructura de unificación técnica en un solo grupo, lo que puede ser bueno para los jóvenes en desarrollo, pero no para atletas ya hechos que requieren preparación específica para esta disciplina individual.

En proceso de recuperar su nivel, el campeón mundial en la prueba de 20 kilómetros en Berlín 2009 señala que, lejos de unificarse, los grupos han vuelto a dispersarse y hay enfrentamiento con la Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo que, tras el lanzamiento del programa a través de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, retiró respaldos de campamentos y competencias a quienes no se sumaron a la propuesta dirigido por un grupo de entrenadores.

“El proyecto no está funcionando porque no sirve y de todas formas hay sectores porque este es un deporte individual. En la época de Jerzy Hausleber funcionó trabajar en un solo grupo nacional, pero ni eran muchos marchistas y no había tanta competencia en el mundo.

En su momento algunos países que ahora son potencia vinieron a ver lo que se hacía en México, así que lo que nos toca ahora es ir a competir y revisar lo que están haciendo para mejorar y volver a ganarles, asentó Sánchez, quien continúa su entrenamiento en el Centro Deportivo Olímpico Mexicano (CDOM) y se repone de una operación de apéndice a la que fue sometido hace dos semanas.

Sánchez dijo que tras anunciarse el programa retiraron respaldos de campamentos y competencias a los que no se sumaron al proyectoFoto Jam Media

Indicó que al margen del inconveniente en su estado de salud, que se presentó después de la Copa del Mundo de China, sus resultados no han sido tomados en cuenta: “Hay omisiones. Se me ha marginado en la parte competitiva. Por ejemplo, cuando solicité ir al Challenger, donde tenía un lugar seguro para asegurar una medalla, se me negó el apoyo, y lo cierto es que ahora ya no tengo para costearme una competencia en Europa o Asia.

Se complican las cosas y competir en México no es suficiente para un atleta de alta categoría. Tenemos que pensar en grande y ese es el problema, que si tuviéramos dirigentes que pensaran así, otra cosa sería.

Su propuesta es que las autoridades dejen trabajar a los grupos de forma independiente, como lo venían haciendo: Que se acepte que el proyecto no está funcionando correctamente y que se junten los entrenadores para planificar nuevos sistemas de entrenamiento y aplicarlo en los atletas. Que cada entrenador vea qué está haciendo mal.

Recordó que esa era la idea original de Jesús Mena al llegar a la Conade, pero todo se deformó.

Su madre y entrenadora, Graciela Terán, quien además dirige a un grupo de niños en el CDOM, indicó que es importante que las autoridades cesen el esquema de un solo grupo nacional, que reconozcan su inoperancia y no frenen el apoyo a quienes lo requieren.