Marlene Adán, de 20 años, quien tenía ocho meses de embarazo, fue asesinada el pasado 2 de abril, presuntamente por integrantes de una banda de traficantes de menores. Este domingo, a nueve días de que la joven fue sepultada, sus familiares, amigos y vecinos marcharon por la cabecera municipal de Emiliano Zapata, Morelos, para exigir al gobernador Graco Ramírez que cesen los asesinatos en la entidad, y se castigue a los homicidas.

Alejandra Anaya, suegra de Marlene, recordó que el cadáver fue hallado en una casa particular cercana al panteón de Emiliano Zapata, que sería propiedad de Gabriela Esquivel, mujer que hizo amistad con Marlene días antes de su muerte. Esa señora (Gabriela), con su padre José Luis Esquivel y su hermano Emanuel, ya detenidos, y otras dos personas fugadas, presuntamente asesinaron a Marlene: la estrangularon, la degollaron y le asestaron seis puñaladas en el corazón; le abrieron la panza (con un objeto punzocortante) desde el estómago hasta la pelvis en forma de zigzag, afirmó.

Para los familiares de Marlene el asesinato fue resultado de tráfico de menores. Alejandra exigió al gobernador de Morelos que estas personas no salgan libres, porque saldrían a matar; creemos que se trata de una banda”. Adelantó: este lunes haremos otro mitin en plaza de armas (en Cuernavaca) para que no quede impune la muerte de mi nuera y mi nieta.

En Chilpancingo, Guerrero, el edil de Acapulco, Luis Walton, se refirió a los feminicidios recientes en Acapulco. Hubo dos en Plan de los Amates y el otro fue por La Jardín. Destacó que más de 250 elementos de la Policía Federal, del Ejército y de la Marina, así como policías estatales y municipales operarán en el puerto, de tal forma que para esta Semana Santa son más de 7 mil elementos en el cuidado de Acapulco.