Notimex, 8 de abril.

Migrantes de origen mexicano iniciaron este martes una huelga de hambre frente a la Casa Blanca para demandar la excarcelación de sus familiares, al tiempo que pidieron al presidente estadunidense Barack Obama una política migratoria humanitaria.

José Valdez, cuyo hijo nacido en Michoacán fue detenido; Naira Zapata, inmigrante de Puebla cuyo esposo fue arrestado, y Cynthia Díaz, quien busca la liberación de su madre, dijeron que consumirán sólo líquidos hasta que el cuerpo aguante.

Los inmigrantes, apoyados por la Red Nacional para la Organización de Jornaleros (NDLON), celebraron una rueda de prensa en la acera frontal de la Casa Blanca e insistieron en que el presidente puede usar su facultad ejecutiva para liberar a sus familiares.

Naira Zapata, inmigrante poblana, dijo que esta huelga de hambre es para que Obama nos escuche y que este sistema migratorio, que está roto, avance y se ponga un freno a la separación de tantas familias.

Naira viajó a la Casa Blanca con sus dos hijos, de tres años y ocho meses, respectivamente. Una mujer se los cuidará durante la huelga de hambre.

José Valdez, de 55 años, participó en la huelga en demanda de la liberación de su hijo, pues teme que sea deportado a Michoacán, su estado natal. Esto no es político, no somos de ningún partido, estamos luchando por seres humanos, añadió.

Los tres realizarán su huelga de hambre en el Parque Lafayette, frente a la Casa Blanca.

La nueva movilización ocurrió luego que cientos de inmigrantes protagonizaron el sábado una protesta frente a la Casa Blanca en demanda del fin de las deportaciones. Sin embargo, Obama se encontraba jugando golf fuera de la residencia.