Chetumal, QR, 26 de marzo.

Aproximadamente 120 estudiantes, burócratas despedidos y simpatizantes del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) marcharon este jueves para protestar ante el Congreso local por la aprobación de la ley que restringe las manifestaciones,

La nueva ley –que será revisada, según anunció el gobernador Roberto Borge– causó rechazo en redes sociales, así como entre empresarios y representantes de asociaciones civiles de Quintana Roo.

El Congreso estatal estaba vacío (reanudará actividades el próximo martes) y resguardado por 40 policías antimotines y 14 patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública.

No a la represión. No nos tomaron en cuenta los diputados y no haremos caso a esta ley, corearon los universitarios, acompañados por la ex diputada local perredista Beatriz García.

La Ley de Ordenamiento Social, que los diputados de los partidos Revolucionario Institucional y Verde Ecologista de México aprobaron el lunes pasado, prohíbe protestar en zonas históricas o turísticas, así como en avenidas principales; obliga a los manifestantes solicitar permiso con al menos 48 horas de antelación, prohíbe el uso de injurias en las protestas y los bloqueos en carreteras y avenidas.

Borge pospuso la publicación de la ley en el Periódico Oficial del Estado para someterla a una cuidadosa revisión jurídica. En su cuenta de Twitter, el mandatario advirtió que no dará marcha atrás.

El presidente del Comité Ejecutivo Estatal del Partido Acción Nacional, Eduardo Martinez, llamó al gobernador a vetar la ley y convocar a foros de consulta.

El presidente de la gran comisión del Congreso local, José Luis Toledo, argumentó que Quintana Roo debe promoverse como destino turístico seguro, lo cual se logrará con la regulación de las marchas.

(Con información de Patricia Vázquez, especial para La Jornada)