Atlético de Madrid, que derrota 2-0 al Betis, es líder, seguido de merengues y azulgranas
Buen futbol y polémica arbitral por sendos penales en el Santiago Bernabéu
El argentino supera la cifra de goles de Hugo Sánchez en la liga y es el máximo anotador en los clásicos
Lunes 24 de marzo de 2014, p. 2
Madrid, 23 de marzo.
El Barcelona remontó y se impuso 3-4 al Real Madrid en un clásico vibrante y con una actuación magistral de Lionel Messi, autor de un triplete, con lo cual se incrementó la tensión en la lucha por la cima de la liga española, a nueve jornadas del final.
El equipo azulgrana se apoyó otra vez en su máxima figura, autor de tres goles y una asistencia, y redujo las distancias respecto de la cima de la tabla de posiciones, en la fecha 29.
Ahora, el Atlético de Madrid (70 puntos) quedó como líder, con las mismas unidades que el Real Madrid, pero con ventaja del goleo, y ambos apenas a un punto del Barcelona.
El clásico tuvo de todo: penales, tarjetas rojas, polémica y, sobre todo, buen futbol. Y si se trata de buen juego era imposible que Messi no apareciera en escena.
El argentino se robó el espectáculo, mantuvo con vida al Barcelona cuando parecía muerto y dio la estocada final a un Real Madrid disperso desde que se quedó con 10 hombres, por la expulsión de Sergio Ramos (minuto 65).
Nuevas marcas
Como si fuera poco, Messi se convirtió en el máximo artillero de la historia del derbi español, con 21 tantos, al superar los 18 goles anotados en su momento por el mítico Alfredo di Stéfano.
Otro récord para el astro argentino fue que se colocó como segundo máximo anotador de la historia de la liga con 236 tantos, dos más que el mexicano Hugo Sánchez, ídolo madridista. Leo ya sólo es superado por los 251 de Telmo Zarra, el mítico atacante del Athletic de Bilbao de los años 40 y 50.
Sánchez consiguió sus tantos con Atlético de Madrid (1981-1985), Real Madrid (1985-1992) y Rayo Vallecano (1993-1994).
La Pulga anotó a los 42, 65 y 84 minutos, los dos últimos de penal, mientras Andrés Iniesta había abierto la cuenta (7). Para el Real Madrid marcaron Karim Benzema (20 y 24) y Cristiano Ronaldo, de penal (55).
Real Madrid, por contraparte, dijo adiós a un invicto de 31 partidos. Su anterior derrota había sido precisamente ante el Barcelona en la primera vuelta.
El equipo azulgrana dominó el inicio del duelo pese a la presión intensa del Real Madrid en su campo. El cuadro visitante logró bajar el ritmo del juego e intentó, cuando pudo, elaborar lo que mejor se le da: la distribución en medio del campo.
Xavi y Busquets se mostraron ágiles y Messi aparecía para cubrir el nerviosismo y la inseguridad de Neymar sobre la derecha del ataque azulgrana.
Neymar protagonizó una tímida primera ocasión de peligro tras recibir un gran pase de Messi, pero el portero Diego López controló. Posteriormente cayó el primer gol, al minuto siete.
Una prolongada jugada colectiva dentro del campo del Real Madrid finalizó con una asistencia directa de Messi al sector izquierdo del área, donde Iniesta controló el balón y fusiló de zurda al arquero merengue.
El visitante tendría luego oportunidades en los pies de Neymar y el propio Messi para aumentar la diferencia, hasta que el Real Madrid despertó y sacó a la luz la maquinaria fulminante de su ofensiva.
Ángel di María y Benzema se convirtieron en la peor pesadilla del sector derecho de la defensa rival y precisamente por esa vía se produjeron los dos goles del equipo local en cuatro minutos.
El primero llegó gracias a un centro del argentino que el francés cabeceó al ganar con comodidad la posición a Javier Mascherano. El segundo, un nuevo centro de Di María luego de superar a Alves y una definición magnífica del galo, tras otro despiste de Mascherano.
El Barcelona entró en crisis una vez que le revirtieron el resultado y fue Messi quien se encargó de mantenerlo en el partido cuando el vendaval blanco arrasaba.
El argentino encontró una pelota perdida en el área a dos minutos del descanso y con olfato goleador dejó igualado el encuentro.
En el complemento, el Real Madrid, otra vez con su presión asfixiante, se rencontró con la ventaja en una jugada polémica.
Dani Alves derribó a Cristiano a pocos centímetros del área, pero el árbitro Alberto Undiano Mallenco interpretó que fue penal. El portugués lo hizo efectivo con tiro potente.
Pero entonces Messi apareció otra vez y le devolvió la vida al Barcelona cuando parecía muerto. El argentino sacó un nuevo conejo de la chistera. Dio una asistencia mágica a Neymar –quien estaba en fuera de lugar– y cuando éste ya estaba en el área, Sergio Ramos lo rozó para una falta de último recurso: penal y tarjeta roja para el capitán merengue.
Messi volvió a empatar el duelo; además, dio 25 minutos a su equipo para aprovechar su superioridad numérica y quedarse con el partido.
Una vez en desventaja, el Real Madrid se replegó en su campo y se dedicó a cuidar el empate, que le permitía mantener la diferencia de cuatro puntos respecto de su máximo rival.
Pero no hay nada más peligroso que dejarle espacio al Barcelona para mover el juego: a falta de seis minutos, Iniesta fue arrollado en el área por Xabi Alonso. Messi anotó otra vez de penal y se volvió a robar el show de un clásico en el estadio Santiago Bernabéu.
Antes del derbi que monopolizó la atención, el Atlético de Madrid cumplió su misión y ganó 2-0 en el terreno del Betis, último de la tabla.
Los tantos colchoneros llegaron en la segunda parte, primero por medio de Gabi Fernández (58), que sorprendió al arquero Antonio Adán con un fuerte disparo frente al área, y luego por conducto del hispano-brasileño Diego Costa (64), quien empujó a la red tras recibir un pase con la cabeza de Jorge Resurrección Koke.
El Betis había quedado con 10 hombres en el minuto 55, por la expulsión del uruguayo Braian Rodríguez.
En el turno matinal, el Sevilla se colocó quinto con un triunfo por 2-1 en el terreno del Osasuna, con tantos de Jairo Sampeiro (27) y el colombiano Carlos Bacca (46, de penal).
Por su parte, el Valencia superó 2-1 con doblete de Javi Fuego al Villarreal (séptimo), que todavía lo supera en seis puntos. El mexicano Giovani dos Santos marcó el único de los suyos, al 83, y llevó a 10 dianas. Javier Aquino ingresó al minuto 62, pero poco pudo aportar.