La historia detrás de los pianos consignados en el Museo de la Música del pueblo minero El Triunfo, Baja California Sur; un atlas personal de usos de la letra X en la arquitectura mexicana contemporánea, y una reflexión sobre las formas de trabajo que se han instaurado dentro de la manufactura multinacional de bienes de consumo, demuestran la diversidad de intereses artísticos que recoge la tercera Edición del Programa BBVA Bancomer-MACG Arte Actual.

Se trata de El Triunfo, instalación doble-canal de video HD y 16mm transferido a video DH, de Florencia Guillén (México, Distrito Federal, 1977); mesa de madera con objetos, video HD e impresiones de inyección de tinta, de Ramiro Chaves (Córdoba, Argentina, 1979), y RH Reporte, video HD, de Jorge Scobell (Chihuahua, 1983), quien estudió mercadotecnia y trabajó como supervisor de recursos humanos en varias plantas trasnacionales antes de cruzar sus experiencias con el arte contemporáneo.

Para su tercera edición, el programa recibió un total de 199 carpetas representativas de los 24 estados del país. De allí fueron seleccionados los artistas antes mencionados, así como los oriundos de la ciudad de México, Dulce Chacón (1976), Alfadir Luna (1982), Félix Luna (1983) y Yéssica Sánchez (1976); Leo Marz (Guadalajara, 1979); Pablo Rasgado (Zapopan, 1984), y Jessica Wozny (Langenfeld, Alemania, 1978), quienes exhiben bajo el título de La voluntad de la piedra, en el Museo de Arte Carrillo Gil (MACG).

En la primera edición se recibieron 146 carpetas, pero con la representación de sólo cinco entidades federales, señaló Gabriela Velázquez, directora de Fomento Cultural BBVA Bancomer, lo que habla del posicionamiento del programa. En esta ocasión la muestra viajará a Sonora, Baja California Norte y Puebla.

Plataforma formativa

De acuerdo con Velázquez, el presente programa ha sido fundamental para reforzar nuestra vocación, que consiste en apoyar la educación en el país. Esta plataforma formativa y crítica busca la profesionalización de los artistas y el desarrollo de un proyecto artístico maduro.

Catalina Lozano, curadora de la muestra, expresó que los artistas seleccionados trabajan en procesos a largo plazo e investigaciones que encuentran diferentes formas de personalizarse: Tenemos desde artistas que proceden de forma muy manual, como Jessica Wozny, así como otros que están muy metidos en la producción audiovisual, como Leo Marz, y en el lenguaje que ha generado Internet. Muchos son proyectos abiertos que seguirán en desarrollo y tendrán más vidas.

Además, en muchos de los proyectos los autores tocan realidades actuales, pero desde una mirada oblicua. Por ejemplo, los pianos importados de El Triunfo testimonian la ola de migración europea que vivió la región, resultado del auge minero entre finales del siglo XIX y principios del XX, y su despoblación posterior a la Revolución de 1910.

El proyecto también consiste en un catálogo, cuyos ensayos no hablan precisamente de las obras presentadas, sino del concepto que trabaja cada uno de los artistas, ya que a lo largo de casi un año se les dio seguimiento.

La voluntad de la piedra se exhibe en el Museo de Arte Carrillo Gil, avenida Revolución 1608, San Ángel.