Organizaciones civiles presentaron una demanda de amparo en contra de la eliminación del impuesto a los productos de tabaco hechos a mano. Los legisladores adoptaron esa medida a finales de 2013, pero representa una regresión en la política para erradicar el tabaquismo en el país, advirtió Érick Antonio Ochoa, director de Iniciativas de la Fundación Interamericana del Corazón (FIC).

También comentó sobre el impuesto especial a productos y servicios (IEPS) que se aplica a los cigarros en el país. Debido a que no está indexado a la inflación ya ha empezado a bajar la recaudación. En 2013, el gobierno obtuvo 34 mil 190 millones de pesos, pero al descontar la inflación, el monto fue menor 1.3 por ciento respecto de la recaudación de 2012.

El activista criticó la decisión de diputados y senadores de eliminar, a partir de este año, el impuesto fijo a puros y tabacos labrados hechos enteramente a mano, lo cual también representa una violación al derecho a la salud de las personas.

Recordó que México ratificó en 2004 el Convenio Marco para el control del Tabaco, el cual impone la obligación de gravar dichos productos, de tal manera que ayuden a disuadir a los consumidores y consumidores potenciales, especialmente niños y jóvenes.

Está comprobado que los cigarros hechos a mano y los manufacturados son igualmente dañinos, por lo cual las políticas fiscales para disminuir su consumo deben ser las mismas.