Morelia, Mich., 21 de marzo.

Un centenar de integrantes de grupos de autodefensa se manifestaron frente a la base naval de La Placita, en el municipio de Aquila, para exigir que les devuelvan las 14 armas que elementos de la Secretaría de Marina les decomisaron hace dos días.

Antonio Ramírez, comunero del municipio, aseguró que no van a negociar nada hasta que les entreguen sus armas, pues de lo contrario los dejarían indefensos ante la delincuencia organizada.

El 14 de febrero, acompañados de fuerzas federales, los comunitarios tomaron La Placita, población costera de aproximadamente mil 200 habitantes, localizada a unos 20 kilómetros de Colima. Lo que estamos viendo son los bandazos que da el gobierno y que cada vez pareciera más que apoya a los criminales, dijo Ramírez.

Según versiones de comuneros nahuas, La Placita es una población mestiza considerada refugio de Los caballeros templarios; los pequeños propietarios de ese lugar han tenido desde hace dos décadas graves diferencias por la propiedad de tierras con los comuneros nahuas de Ostula.

El grupo de autodefensa que tiene controlada La Placita está integrado por comuneros de Ostula, ya que el movimiento comunitario que iniciaron los habitantes de la cabecera municipal de Aquila prácticamente fue desmantelado por las fuerzas federales en agosto de 2013, cuando detuvieron a 45 guardias, incluyendo a su líder, Agustín Villanueva.

Ramírez explicó que primero los desarmaron, luego fueron encarcelados y más tarde permitieron el retorno del alcalde Juan Hernández, a quien los comuneros nahuas habían expulsado por que, dijeron, está involucrado con la delincuencia organizada.

Por otra parte, se informó que 15 soldados y cinco civiles resultaron lesionados cuando un automóvil particular se impactó contra un vehículo militar en la carretera El Temazcal-Ciudad Altamirano, municipio de Huetamo.