Destacados académicos universitarios, siete de ellos eméritos, enfatizaron que el auditorio Che Guevara de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) debe ser desocupado, sin importar quién lo controle actualmente, y permanecer abierto para todo tipo de actividades académicas, culturales o políticas de los universitarios.

En un documento firmado por 21 profesores e investigadores de diferentes expresiones de la izquierda universitaria, señalan que ese recinto es de toda la comunidad, por lo que ningún argumento o proyecto político justifica su ocupación o control por parte de uno o varios grupos en particular.

En tanto, en lo que será su primera sesión del año, este viernes el Consejo Universitario (CU) emitirá un pronunciamiento –acompañado de miles de firmas de estudiantes, académicos y trabajadores– sobre la situación en este espacio de la Facultad de Filosofía y Letras (FFL), que en realidad está tomado desde septiembre de 2000, siete meses después de que se rompió la huelga estudiantil de 1999-2000 en la UNAM.

A su vez, los consejeros técnicos estudiantiles de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPS) dieron a conocer un escrito en el que señalan que ningún grupo o colectivo debe erigirse en propietario del recinto, que en realidad pertenece a toda la comunidad universitaria. Consideraron que la gestión y regulación del inmueble corresponden exclusivamente a la comunidad de la FFL.

En los últimos tres meses, dos grupos se han enfrentado por el control del auditorio Justo Sierra, el cual fue renombrado Che Guevara durante el movimiento estudiantil de 1968. En los hechos, actualmente este espacio sólo está abierto para expresiones afines a los grupos que lo mantienen tomado, sin que la mayoría de los estudiantes, profesores o trabajadores se animen a acercarse.

En el documento dado a conocer ayer, los académicos e investigadores, entre ellos los eméritos Adolfo Gilly, Manuel Peimbert, Alfredo López Austin, Silvia Torres, Annie Pardo, Luis de la Peña y Humberto Muñoz, advierten que el auditorio Che Guevara debe estar abierto ya para todos los universitarios.

También suscriben el pronunciamiento Imanol Ordorika, Roberto Rodríguez, Ana María Cetto, Herlinda Suárez, Manuel Gil Antón, Mario Rueda, Alejandro Márquez, Andrés Lozano, Jorge Martínez Stack, Armando Alcántara, Raúl Domínguez, Marion Lloyd, José Antonio Pérez Islas y Pilar López.

Los investigadores subrayan que el auditorio, al que llaman Che Guevara, pertenece a la FFL, por lo que la administración y mantenimiento del mismo debe estar a su cargo.

Es tarea de las autoridades de la UNAM remozar, amueblar y equipar el auditorio en cuanto sea desocupado. Y corresponde al consejo técnico (de la FFL) garantizar su utilización abierta, transparente y sin restricciones, como ocurrió hasta 2000. En tanto que profesores, estudiantes y trabajadores deben supervisar que eso se cumpla, finalizaron.

De su lado, los 10 consejeros técnicos estudiantes de la FCPS expresaron que se trata de un espacio fundamental para el desarrollo de la vida universitaria, donde se han dado expresiones culturales, académicas y científicas, así como distintos episodios de varios movimientos estudiantiles.

Los jóvenes censuraron los actos de violencia suscitados el pasado 3 de marzo entre los grupos que se disputan el control del espacio, y recordaron que fueron las mismas autoridades de la UNAM las que tras la huelga de 1999-2000 clausuraron el recinto, colocándole puertas de acero, desmantelando sus butacas y negando a la comunidad su uso irrestricto en cuanto a la organización estudiantil.