Estudiantes normalistas y campesinos del oriente de Morelos marcharon por Cuernavaca para demandar que se cancele el Proyecto Integral Morelos, que consiste en la construcción de dos termoeléctricas, un gasoducto y un acueducto. Aseguraron que la obra acabará con la vida campesina y pondrá en riesgo a la región.

Estudiantes de la escuela normal rural de Amilcingo y de la normal urbana federal de Cuautla, así como campesinos del poblado de Amilcingo, municipio de Temoac, y de Jantetelco y Huexca, municipio de Yecapixtla, iniciaron la marcha en la iglesia El Calvario, pararon en el Congreso local y llegaron al palacio de gobierno estatal, donde hicieron un mitin.

En ambos sitios los manifestantes entregaron escritos firmados por organizaciones civiles que apoyan a los campesinos, quienes sostienen que el proyecto acabará con sus tierras de cultivos, y contaminará el agua y el aire, además de que los pondrá en riesgo porque estará cerca del volcán Popocatépetl.

Exigieron al mandatario estatal, Graco Ramírez, que deje de reprimir física, sicológica o jurídicamente a nuestros compañeros de lucha, como ya sucedió en Huexca, Jantetelco, Cuautla, Ayala y Amilcingo.

Piden garantías para manifestarse

Integrantes de la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos pidieron al Alto Comisionado de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México y a las comisiones estatal y nacional ordenar medidas cautelares en favor de los organizadores de la marcha del primero de abril para exigir la renuncia del gobernador, ya que algunos han sido amenazados vía telefónica.

Mientras, alumnos de la Coordinadora Estudiantil Normalista del Estado de Oaxaca –que agrupa a las 11 escuelas normales del estado– se apoderaron de seis autobuses urbanos para ir a las radiodifusoras de la capital para exigir que los dejen dar a conocer sus demandas, entre ellas la asignación de plazas a los egresados, becas, material de apoyo y mejoramiento de la infraestructura de los planteles.