Imparables, asaltos, extorsiones, secuestros y asesinatos contra el gremio, denuncian
Comisión de diputados ofrece intervenir y buscar justicia por reciente plagio y homicidio de una enfermera
Sábado 8 de marzo de 2014, p. 26
Cuernavaca, Mor., 7 de marzo.
Alrededor de 4 mil médicos y enfermeras marcharon en esta ciudad para exigir al gobernador perredista, Graco Ramírez Garrido, y al alcalde priísta de Cuernavaca, Jorge Morales Barud, seguridad para ejercer su profesión y justicia por el asesinato de su compañera María del Rocío Rendón Millán, quien fue secuestrada el 28 de febrero y encontrada muerta en la cajuela de su automóvil el 3 de marzo.
El contingente partió a las 9 horas de la glorieta La Paloma de la Paz, encabezado por trabajadores de la Secretaría de Salud del estado, pese a que el gobierno estatal amenazó con descontarles el sueldo si marchaban, pero ellos decidieron salir porque, dijeron, están cansados de sufrir delitos todos los días.
Los manifestantes hicieron una parada en la sede de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), donde exigieron que se detenga y castigue a las personas que privaron de la libertad a Rendón Millán, de 38 años, cuando se dirigía a su trabajo, en el Centro de Salud de Cuernavaca, ubicado a tres cuadras del zócalo.
Posteriormente avanzaron hacia el centro de la ciudad y concluyeron en el Congreso local, donde demandaron la intervención de los diputados para que el gobernador Graco Ramírez y el edil Jorge Morales, cumplan con su deber de garantizar seguridad a todos los trabajadores del sector salud y a la sociedad en general.
Una comisión de diputados les ofreció intervenir para garantizar seguridad a los trabajadores del sector salud y justicia para el homicidio de la enfermera.
Además de los trabajadores de la Secretaría de Salud de Morelos también marcharon em-pleados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), del Colegio de Médicos de Morelos, de hospitales privados y estudiantes de la maestría de enfermería de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, donde María del Rocío estudiaba una maestría.
Martha Herrera Segura, delegada sindical del Centro de Salud donde laboraba la enfermera asesinada, recordó: Ella entraba a las siete de la mañana, no llegó, sus familiares pensaron que estaba trabajando, por lo que hasta la tarde comienzan a preguntar y a buscarla, nosotros les dijimos a su familia que no llegó a trabajar
.
El lunes los dirigentes sindicales, sus compañeros y familiares acudieron a la PGJE para exigir la ubicación de su paradero, pero les informaron que por la mañana habían encontrado a una mujer muerta encajuelada, en Ocotepec, Cuernavaca, que portaba uniforme de enfermera. Era ella.
Gil Magadán Salazar, dirigente de la sección 29 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud, dijo que ese plagio y asesinato fue la gota que derramó el vaso, pues desde hace meses los integrantes del gremio sufren asaltos, extorsiones, secuestros y asesinatos, sin que las autoridades de los tres niveles de gobierno garantice su seguridad para que puedan ir a trabajar tranquilos y sin temor.
Magadán dijo que en los meses recientes ha habido médicos golpeados y asaltados dentro de los hospitales, clínicas o centros de salud; dijo que la delincuencia organizada se ha llevado médicos de la clínica Galeana, que está a dos cuadras del palacio de gobierno. ¡Ya basta!, queremos seguridad para hacer nuestro trabajo y para todos los ciudadanos
, remató.
Rechazó que este movimiento está politizado y lo único que demandan es seguridad, pues el gobernador Graco Ramírez ha dicho que actores políticos de oposición están detrás de esas protestas.
Pidió que la Secretaría de Seguridad Pública y la PGJE apliquen programas para prevenir delitos, que coloquen cámaras en lugares estratégicos de la ciudad, alumbrado público y los policías municipales patrullen la ciudad.