El subdirector del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), Sergio Ramírez Cárdenas, negó ayer que la educación musical en México sea deficiente, como la evaluó hace unos meses un estudio de la prestigiada institución estadunidense Julliard School.

Sostuvo que en años recientes ha sido evidente el progreso en ese campo a escala nacional, lo cual puede comprobarse, dijo, en el nivel y el talento que los compositores e intérpretes muestran en los escenarios.

Entrevistado al término de la ceremonia inaugural de la sexta Reunión del Comité Intergubernamental del Programa de Fomentos de las Músicas Iberoamericanas (Ibermúsicas), que tuvo lugar en un hotel en el Centro de la capital, el también director de orquesta y pedagogo precisó que ese repunte en la educación del arte sonoro se remonta a dos décadas.

Desde entonces, indicó, son cada vez más los egresados de las escuelas de música que entran a las principales orquestas del país.

Esto habla de una mejora permanente en la parte de la educación. Por supuesto, hay mucho que hacer, la eficiencia en concluir la carrera ha mejorado también mucho. Creo que vamos por buen camino, agregó.

La visión de Julliard tiene elementos que debemos retomar; tiene otros, como el de privatización, que vamos a omitir, pero creo que es muy importante tener esas opiniones externas para revalorar lo que vamos hacer.

Mejorar la calidad de vida de los pueblos de la región mediante sus expresiones sonoras es la finalidad del Programa Ibermúsicas. Durante dos días, ayer y hoy, representantes de Argentina, Chile, Brasil, Colombia, Costa Rica, Paraguay, Perú y Uruguay trabajan para aprobar el programa operativo anual para este año, las convocatorias, los proyectos especiales y la distribución del fondo económico.

Por formar nuevos públicos

Los objetivos específicos de la iniciativa son apoyar la formación de nuevos públicos para las propuestas musicales en la región, con énfasis en los jóvenes y los grupos de poblaciones en situación vulnerable, además de fomentar la distribución, la circulación y la promoción de la música iberoamericana en los países integrantes del programa.

De igual manera, incentivar las producciones y las coproducciones entre promotores públicos y privados del área iberoamericana y alentar la creación musical y las residencias artísticas.

Otro de los propósito es impulsar la valoración de la diversidad y riqueza culturales inherente a las músicas iberoamericanas con base en la Convención por la Dignidad Cultural de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), incorporando la perspectiva de género y etnia para apoyar la creación musical de los pueblos indígenas y afrodescendientes.

Respecto de la reunión en México, Ramírez Cárdenas especificó que los representantes de los países analizarán las propuestas de convocatorias y determinarán el plan de trabajo del programa para este año, así como la distribución del fondo económico, el cual es de unos 600 mil dólares, de los cuales México aporta 120 mil.

La ceremonia fue encabezada, como país anfitrión, por la directora y el subdirector del INBA, María Cristina García Cepeda y Sergio Ramírez Cárdenas, de forma respectiva, así como por José Luis Martínez, director de Asuntos Internacionales del Consejo Nacional para la Cultura  y las Artes.

Estuvieron presentes José Luis Castañeira de Dios, director de Artes de la Secretaría de Cultura de Argentina y presidente del Comité Intergubernamental del Programa Ibermúsicas, y Enrique Vargas, subdirector de Asuntos Culturales de la Secretaría General Iberoamericana.