Las entidades mexicanas económicamente más desarrolladas se caracterizan por tener mayores capacidades en ciencia y desarrollo tecnológico; además, son los estados que encabezan el Ranking de Ciencia, Tecnología e Innovación 2013.

Los resultados de este estudio, realizado por el Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCT) –órgano asesor y de consulta del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología–, reportan que el Distrito Federal y Nuevo León destacan por sus altos indicadores de empresas innovadoras (que basan sus procesos en el conocimiento científico), ya que por cada 10 mil unidades económicas tienen 17.9 y 19.8 compañías de esos tipos, respectivamente.

El análisis también muestra a Querétaro como la segunda entidad que más centros de investigación tiene por cada 100 mil integrantes de la población económicamente activa; en tanto, Jalisco cuenta con un equilibrio de 92.3, en escala de cero a 100 en relación con la productividad científica, lo que muestra que su vocación económica está muy relacionada con su vocación de producción científica.

Gabriela Dutrénit, coordinadora general del FCCT, señaló que esta segunda edición de la clasificación (la primera se presentó en 2011) se elaboró para responder a la necesidad de las comunidades de ciencia, tecnología e innovación, los tomadores de decisión en el ámbito de la política pública del sector y la sociedad en general de disponer de medidas e indicadores confiables, sintéticos y sistemáticos, que les permitan identificar oportunidades, debilidades y fortalezas en las 32 entidades federativas del país, un mayor involucramiento y contribución al desarrollo económico y social de México.

Como adelantó ayer este diario, los resultados del estudio –que se presentaron anoche– indican que en las primeras cinco posiciones generales donde existe mayor capacidad científica, de investigación e innovación son Distrito Federal, Nuevo León, Querétaro, Jalisco y Morelos; en contraposición, se encuentran Tabasco, Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Campeche cinco entidades con menor desarrollo en estos rubros.

Recomendable, generar políticas públicas

Entre las conclusiones destaca que se pueden identificar patrones de comportamiento interesante entre las distintas economías, basados en sus capacidades científicas, tecnológicas y de innovación. Es decir, entre más desarrolladas estén las capacidades en estos rubros de los países, mayor posibilidad tendrán de apropiarse de conocimientos, transformarlos y aplicarlos en su beneficio. Asimismo, mayores serán sus posibilidades de atraer inversiones, de tener mejores herramientas para fomentar el crecimiento económico, de generar más y mejores empleos y de ofrecer a sus residentes un mayor bienestar.

El estudio muestra grandes asimetrías en la producción y capacidades de ciencia e innovación en las 32 entidades federativas.

En las posiciones seis a diez aparecen Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila y Aguascalientes. Los estados que aparecen del sitio 11 al 20 son Yucatán, Quintana Roo, Puebla, Tlaxcala, Colima, Guanajuato, San Luis Potosí, Tamaulipas, Sinaloa y Baja California Sur. En tanto, en los puestos 21 a 27 se colocaron Durango, Zacatecas, Nayarit, Michoacán, Hidalgo y Veracruz.

Debido a estas grandes asimetrías, el FCCT recomendó generar políticas públicas para estos temas, que deben ser diferenciadas de acuerdo con los conglomerados identificados, de tal manera que se puedan generar estrategias direccionadas para fortalecer las capacidades científicas, atendiendo a las vocaciones científicas y tecnológicas de cada entidad federativa, lo que coadyuvaría a su desempeño económico y social.