Santos, 28 de enero.

La historia tensa del Barcelona hoy fue contada con nuevos matices, luego de que Neymar da Silva Santos, el padre y agente del delantero brasileño Neymar, admitió que recibió del club azulgrana una comisión de 40 millones de euros (más de 54 millones de dólares) por el pase del jugador.

Silva Santos expresó que el monto, acordado en 2011, se destinó a asegurarle al Barcelona la prioridad en el fichaje del ariete, pero sostuvo que el acuerdo no significó un precontrato, que sólo es permitido por la FIFA como máximo seis meses antes de la concreción del negocio.

El padre y agente del delantero sostuvo que el acuerdo de 2011 incluía su comisión por 10 millones de euros (14 millones de dólares), pagada por adelantado en ese mismo año, y un seguro de 30 millones de euros (41 millones de dólares) para proteger a ambas partes.

Según explicó, en caso de que Neymar decidiera fichar por otro club o permanecer en el Santos, tendría que devolver al Barcelona el monto pagado en adelanto, sumado a una indemnización por 30 millones de euros.

El Barcelona, a cambio, se comprometió a pagarle 30 millones de euros al padre del jugador en caso de que el negocio se concretara, lo que ocurrió en mayo del año pasado.

Hicimos un acuerdo y lo mantuvimos. Yo corrí riesgos en esta situación. Con los 10 millones de euros del adelanto hice un seguro, para poder pagar los 40 millones si él se lesionaba, afirmó hoy Silva Santos, en su primera declaración sobre el caso.

Silva Santos afirmó que las cláusulas confidenciales del contrato se destinaban a proteger a la persona y a la familia de Neymar, pero que, ante el escándalo, optó por pedir al Barcelona que revelara las cifras del negocio.

Los montos involucrados en el fichaje están siendo investigados por la justicia española y desataron también polémica en Brasil, donde el Santos y el grupo inversor DIS –que detentaban parte de los derechos federativos del jugador– sospechan haber recibido un monto menor que lo debido por su traspaso.

Neymar padre, sin embargo, sostuvo que no hubo ninguna irregularidad, y pidió hoy el fin de la polémica en torno a su hijo, quien tiene la misión de comandar a la selección que buscará en casa el codiciado hexacampeonato en el Mundial de 2014.

Yo no debo nada al fisco de España ni de Brasil. Espero que crean en estas aclaraciones. Queremos paz. Quiero darle paz para que Neymar pueda jugar la Copa Mundial de este año sin especulaciones. Por esto estamos aclarando toda la situación del contrato, enfatizó.

Torbellino en Brasil

Estas declaraciones generaron un torbellino en Brasil, donde, pocas horas antes, el grupo inversor DIS, propietario de 40 por ciento de los derechos federativos de Neymar, anunció que pidió al Barcelona que le muestre los documentos firmados con el Santos.

Los dirigentes opositores a la actual administración del presidente del Santos, Luis Álvaro de Oliveira, quien está de licencia desde el año pasado, aguardan que la justicia española se manifieste sobre este caso para tomar cartas en el asunto, puesto que consideran que el negocio es una historia mal contada.

Cuando contrató a Neymar, el Barcelona aseguró haber pagado 57 millones de euros y se mantuvo firme en esa versión hasta la semana pasada, cuando la justicia española decidió investigar el negocio, ante las sospechas de que el valor del fichaje fue mucho más elevado.

El caso provocó la renuncia del presidente del Barcelona, Sandro Rosell, tras la cual dirigentes del club admitieron que los gastos en torno al traspaso ascendieron hasta 86.2 millones.

Según la institución, además de los 40 millones de euros pagados a la empresa N&N, del padre de Neymar, y de los 17.1 millones de euros (23 millones de dólares) que recibieron los propietarios de los derechos federativos del jugador, el club pagó otros 14 millones de euros (19 millones de dólares) al delantero, de los cuales cuatro millones se refieren a derechos de imagen.

El Barcelona también afirma haber destinado 7.9 millones de euros (11 millones de dólares) al Santos para tener prioridad de fichaje sobre futuras promesas del club brasileño, y dos millones a Neymar padre, para identificar a buenos futbolistas en el equipo.

Además, el club catalán pagó otros 2.7 millones de euros (4 millones de dólares) en comisiones para agentes y la Fundación Barcelona habría destinado 2.5 millones de euros (3.5 millones de dólares) a los proyectos sociales del Instituto Neymar Jr.