Ante varios miles de hombres y mujeres reunidos este domingo en la explanada de la delegación Iztacalco del Distrito Federal, la Unión de Colonias Populares (UCP) de la Red de la Unidad Nacional de las Izquierdas (RUNI) del PRD, manifestaron su decidido apoyo a Carlos Sotelo García para que sea el próximo presidente nacional del PRD e iniciar el inaplazable proceso de recuperación del partido, hoy inmerso en su peor crisis.

Así lo manifestó el dirigente Gilberto Ensástiga Santiago, dirigente de UCP, y otros líderes de las organizaciones ahí reunidas, como el diputado por el DF Rubén Escamilla; la delegada en Tláhuac, Angelina Méndez Álvarez; Roberto Rico, dirigente de la Coordinardora Nacional de Movimientos Populares Línea de Masas (Conmp-LM); Pablo Téllez, líder de los pepenadores del DF; Julio Atenco, de la Coordinadora de Pueblos Indígenas de la Sierra de Zongolica, Veracruz; Enrique Rocha, de la Unión de Trabajadores del Campo (UTC); Rafael Cerón, de la Coordinadora Metropolitana Urbana y Rural de Morelos; los compañeros de UCP Chiapas, con su dirigente, Manuel Moreno.

En su intervención Carlos Sotelo agradeció el respaldo de la UCP-RUNI y manifestó que “el PRD, nuestro partido, vive una grave y profunda crisis que requiere ser superada. El PRD no es sólo los últimos cinco años; el 5 de mayo próximo nuestro partido cumplirá 25 años y, entonces, han trasncurrido más de dos décadas de una intensa y perseverante lucha por la democratización de México. Pero pensamos que en los últimos años se han cometido una serie de errores acumulados que han dañado de forma seria al PRD.

“Otro PRD es posible aún, articulado a las luchas populares, aliado del las organizaciones sociales, presente en las luchas de comunidades y pueblos por la defensa de sus territorios, derechos y causas. Un PRD solidario con las organizaciones que defienden los sistemas ambientales, los derechos humanos, a jóvenes, mujeres y estudiantes. Donde la intelectualidad vuelva a tener espacios paga contribuir con sus capacidades a diseñar un México diferente. Un PRD social, de causas, democrático y nacional. Aliado de las causas de la sociedad para lograr el buen vivir de la gente y no un partido asociado al poder. Un PRD con vocación de poder y no un partido subordinado al poder. Demandamos un PRD sin titubeos en la lucha por revertir la contrarreforma energética, el mayor atraco al país. Recuperar congruencia y coherencia entre el decir y el hacer.

“Deben concluir los silencios, casi cómplices, de la dirección del partido ante sucesos que debilitan la propuesta política del partido.

“El PRD debe seguir siendo el partido principal en la lucha por la democratización de México, por lograr cambiar el modelo.

Para ello debe corregir, rectificar errores cometidos, hoy acumulados.