Aunque la transparencia siempre es incómoda para los gobiernos de cualquier signo político, la exigencia social en materia de rendición de cuentas permitió frenar tentaciones a favor de la opacidad, señaló Jacqueline Peschard, quien este jueves termina su periodo como comisionada del Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (Ifai).

Tras participar ayer en su última sesión plenaria, la especialista leyó un mensaje de despedida, en el cual destacó que dicho organismo ha encarado desafíos importantes para mantener el carácter definitivo de sus resoluciones para los sujetos obligados.

No han sido pocos los intentos jurídicos y políticos para revertir los alcances y la vigencia del Ifai, pero fue la creciente exigencia social de transparencia y rendición de cuentas y, desde luego, la firmeza del Ifai, lo que permitió frenar esas tentaciones a favor de la opacidad, resaltó.

Destacó que el organismo puso en el discurso público los temas de la transparencia y la privacidad, pese a que subsisten resistencias de una cultura burocrática arraigada.

El presidente del Ifai, Gerardo Laveaga, consideró que antes de nombrar al sucesor de Peschard, tendría que concretarse la reforma constitucional en materia de transparencia, pues debido a la próxima ampliación del organismo a siete miembros será necesario designar tres, no sólo uno.

En la misma sesión, el pleno del Ifai determinó por mayoría –con votos disidentes de los comisionados Jacqueline Peschard y Ángel Trinidad Zaldívar– mantener bajo reserva el nombre de cuatro agentes de la Policía Federal, de un total de 16, que laboran en la unidad de enlace de dicha corporación, por considerar que no hacerlo pondría en riesgo su seguridad y la de sus familiares.