El gobierno mexicano, por conducto de la Secretaría de Relaciones Exteriores, impulsó en 2013 una nueva etapa en sus relaciones con América Latina y el Caribe. Sus objetivos se centran en la promoción de mayor diálogo, entendimiento y cooperación, que contribuirá a promover y proteger los intereses de México en la región. La cancillería expresó en un comunicado que esta etapa se verá reforzada y avalada al más alto nivel en enero próximo, en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) a realizarse en Cuba, adonde se prevé la asistencia del presidente Enrique Peña Nieto en visita de Estado y que sea recibido por el presidente de Cuba y pro tempore de la cumbre, Raúl Castro. A escala multilateral, México ha privilegiado las instancias de mayor membresía, como la Celac y la Organización de Estados Americanos (OEA) como foros esenciales para el entendimiento y la búsqueda de consensos sobre los temas de mayor relevancia global y regional. Ellos son la paz, la seguridad y el respeto a los derechos humanos –en el ámbito de la OEA– y el diálogo, la cooperación regional y la lucha contra el hambre y la pobreza, en la esfera de la Celac. También se puso énfasis en foros subregionales, como la Alianza del Pacífico, uno de cuyos logros más importantes es la liberalización comercial arancelaria.