El Centro de las Artes de San Agustín (CaSa) de Etla, Oaxaca, cierra las actividades de este 2013 con la apertura, mañana, de la exposición Zoología fantástica, con obras de Francisco Toledo (Oaxaca, 1940), fundador de esa institución cultural.

La muestra reúne 46 tintas y acuarelas que el artista realizó en 1983 para ilustrar el Manual de zoología fantástica, escrito por Jorge Luis Borges (1899-1986) en 1957, aunque sólo fueron utilizadas 32, con cuya edición el Fondo de Cultura Económica (FCE) festejó medio siglo de existencia.

Tiempo después, los directores de la Galería Arvil, Armando Colina y Víctor Acuña, adquirieron la serie.

Por ello esa muestra, que se alojará en la galería del Chalet, de reciente creación en el CaSa, servirá para festejar 30 años de Zoología fantástica, 44 de la Galería Arvil y los 25 de la nueva época de la revista Artes de México, con la que se coeditó una nueva edición de la misma, con un diseño especial y un texto de José Emilio Pacheco, aunque el primer ensayo es de Carlos Monsiváis (1938-2010). Ambos escritos se exhibirán en esa galería.

Periplo por 70 ciudades

La muestra Zoología fantástica se ha visto en alrededor de 70 ciudades del mundo desde 1986. Incluso se exhibió en 1999 en el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (Iago), fundado por el también promotor cultural Francisco Toledo.

De todos modos, ahora constituye una buena oportunidad para apreciar esa obra de Toledo en Oaxaca, aunque Lourdes Báez, directora del CaSa, expresa que la institución acaba de montar una exposición con trabajos de la vertiente gráfica del artista.

Una ocasión Armando Colina habló de cómo les causó dolor separar las 32 imágenes por estar pensadas como conjunto (La Jornada, 30/X/99).

En contraste con su quehacer, que consiste en vender, decidieron guardarlas. Un día de 1986 murió Borges, entonces, las piezas fueron sacadas de la bodega para su exhibición.

A decir de Colina, causaron furor porque nadie las había visto. En su momento las imágenes utilizadas fueron mostradas en el Palacio de Bellas Artes. Sin embargo, dentro de toda la parafernalia del FCE, se perdieron.

Un amigo de entonces, Carlos Beltrán, quien laboraba en el Programa Cultural de las Fronteras, las empezó a mostrar en exposiciones en la frontera norte. Después, Arvil la llevó a Estados Unidos, Suiza, Argentina, Brasil, Ecuador, Venezuela y Colombia. También se editó un catálogo que reprodujo algunas de las imágenes.

Armando Colina tiene la costumbre de mantener informado a Toledo respecto del movimiento de su obra. Cuando el conjunto estaba por exhibirse en Japón, le escribió al artista, quien se encontraba en Francia. El pintor le contestó:

Vengan a París, porque aquí hay una parte que no se reprodujo. ¿Por qué no la incorporamos de una vez? La muestra de Tokio ya incluía 43 obras.

En vísperas de que Arvil cumpliera su 30 aniversario, se decidió hacer una nueva publicación basada en la zoología fantástica, que documentara todas las imágenes porque la edición del FCE las había fraccionado.

Fieles a su costumbre, los directores de Arvil viajaron a Oaxaca para presentar el proyecto a Toledo. Colina contó que, como a la mitad del proceso, el artista vino a casa y dijo: Oigan, ahora que estuve viendo mis cosas, encontré que hay tres piezas más de la zoología fantástica.

La exposición Zoología fantástica será inaugurada este sábado, a las 12 horas, en el CaSa (calle Independencia s/n, San Agustín Etla, Oaxaca).