Jorge Sánchez, director del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), rindió ayer el informe anual de actividades de esa instancia. Señaló: Actualmente la cinematografía mexicana es la más potente y está a la cabeza de las de Iberoamérica. Además, es muy generosa en términos de sus relaciones con la región en materia de coproducciones y apoyos, lo que debe ser motivo de orgullo.

Según Imcine, en 2013 hubo 99 estrenos comerciales de películas mexicanas, una cifra récord de más de 30 millones de espectadores de cine doméstico, se produjeron 101 cintas con apoyos de los diferentes fondos estatales, se obtuvieron más de 71 premios en festivales internacionales y 81 en nacionales. Estas cifras dan cuenta de un año sin precedente en la historia reciente de la cinematografía mexicana, señaló.

Para Sánchez, el aumento de la taquilla y del público de cine mexicano en 2013 se debió a que “hay un mayor número de películas estrenadas este año, lo cual tiene que ver con el apoyo que dio la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados que se llamó el Eprocine, el cual posibilitó que muchas cintas que se iban a quedar enlatadas pudieran exhibirse.

“En relación con el público, sucede que no podemos negarnos a una tendencia mundial en la que siempre son dos o tres películas que arrastran al resto. En el caso del cine mexicano está claro que las tres películas que hicieron números importantes y las cinco que superaron el millón de espectadores fueron comedias románticas, como No se aceptan devoluciones y Nosotros los nobles”.

Se rompieron prejuicios

Jorge Sánchez destacó que lo importante de este incremento del público del cine mexicano es que se rompieron prejuicios, la gente compró su boleto vio una película mexicana y salió satisfecha, de la cinta y de la decisión que tomó al comprar ese boleto. De esta forma, es inevitable pensar que vamos a tener una presencia de cine mexicano más activa, y lo digo en el sentido de que sea más respaldada por los espectadores en términos de asistencia y complacencia y disgusto, como ocurre en todo arte.

Respecto de la plataforma de cine digital que habría arrancado el pasado 15 de diciembre, afirmó: Seguimos trabajando en ello, el proceso fue más difícil de lo que pensábamos, no por el aspecto técnico de la plataforma, sino por la clasificación y el rescate de soporte de las películas mexicanas... nos ganó la digitalización de una manera brutal. Sin embargo, ya estamos listos con una clasificación adecuada del material y con un proyecto de restauración de materiales en 35 mm, iniciado con los Estudios Churubusco .

A pregunta expresa de La Jornada, Jorge Sánchez respondió que lejos de que el área cinematográfica sea un sector privilegiado, por no sufrir recortes presupuestales para 2014, es una comunidad que se expresa y eso en el caso del cine es una gran ventaja.

Finalmente, Jorge Sánchez desestimó que para el próximo año sin el apoyo del Eprocine, mermen los estrenos de cine mexicano. No creo que eso suceda porque este año logramos, todos los sectores, desatar una sinergia que debemos respaldar con una producción adecuada; pero si vemos la cuestión del Eficine y que los montos asignados para 2014 aumentaron de 500 a 650 millones para la producción y hay 50 millones para la distribución, trataremos de que este dinero repercuta de la mejor forma posible en el ámbito de la exhibición. Aquí vale la pena mencionar que tenemos proyectados al menos dos encuentros con productores, que tienen proyectos importantes, y con contribuyentes grandes y medianos para acercarlos al Eficine y hagan válido ese estímulo fiscal.

Según el informe, la realización de 101 rodajes con recursos públicos, mediante Foprocine, Fidecine y Eficine, representa el más alto nivel de incentivos a la producción en los 30 años recientes de la historia del instituto. Además hay que sumar los 50 proyectos beneficiados con el Estímulo a creadores: 25 de escritura de guion y 25 de desarrollo de proyectos. Asimismo, se produjeron 21 cortometrajes.

Destacada presencia mundial

Otro de los temas sobresalientes de este reporte anual fue que en 2013 el cine mexicano tuvo una destacada presencia en los principales festivales internacionales, encuentros, muestras y retrospectivas que sumaron 367 actos.

Entre los 71 premios internacionales otorgados a los filmes mexicanos destacan los entregados en festivales como Cannes, San Sebastián, Mar del Plata, Toronto, Locarno, Biarritz, Huelva y La Habana, en los que se premió a Heli, de Amat Escalante (Cannes y La Habana); Club sándwich, de Fernando Eimbcke (San Sebastián), y La jaula de oro, de Diego Quemada-Diez, la cual obtuvo numerosos galardones.

Respecto de los reconocimientos en casa a la cinematografía nacional, sumaron 81 premios que se otorgaron en los principales festivales internacionales, como el de Guadalajara, Morelia, Guanajuato, Monterrey y Baja.

De las 99 películas estrenadas (comercialmente y en Cineteca Nacional), 69 fueron apoyadas por el Estado. Además, 27 por ciento fueron documentales, la cifra más alta en la historia reciente del cine nacional; 50 por ciento de los filmes mexicanos fueron operas primas, 20 por ciento fueron dirigidas por mujeres y 77 por ciento de los estrenos tuvieron un lanzamiento con menos de 49 copias.