Bangui, 6 de diciembre.

Francia comenzó este viernes su segunda intervención militar del año en África, al realizar patrullajes en esta capital con el fin de detener una escalada de violencia que en días recientes ha dejado como saldo casi 300 muertos.

La operación se inició y las fuerzas francesas en la República Centroafricana desplegaron patrullas en Bangui, manifestó el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian, a la radio RFI.

En el aeropuerto de Bangui, de donde las patrullas de blindados salen hacia la capital, el ejército francés seguía aumentando su dispositivo.

La misión de los militares franceses, quienes apoyan a las fuerzas africanas desplegadas, es mantener un mínimo de seguridad para que pueda ponerse en marcha una intervención humanitaria, algo que hoy no es posible, señaló Le Drian.

En las calles de la capital centroafricana, donde está interrumpida la circulación de vehículos civiles desde el jueves, no se observaba ningún despliegue masivo de tropas francesas en las primeras horas de la mañana del viernes.

Gran Bretaña puso a disposición de la operación –autorizada por la Organización de Naciones Unidas– un gran avión militar carguero C-7, mientras la Unión Europea decidió destinar 50 millones de euros a ese país africano.

En tanto, en el hospital de la capital la organización Reporteros Sin Fronteras contabilizó al menos 50 muertos por la violencia del jueves. El Comité Internacional de la Cruz Roja indicó que los cadáveres llevados a las morgues de los hospitales, en los lugares de culto y los recogidos en las calles, son al menos 281.