La mayoría de la Cámara de Diputados (PRI, PAN, PVEM y Nueva Alianza) aceptó dispensar todos los trámites legislativos a la minuta de reforma político-electoral, que este jueves irá directamente al pleno para su discusión y aprobación.

La determinación de la mesa directiva y de la Junta de Coordinación Política de San Lázaro de evitar el paso de la minuta por la Comisión de Puntos Constitucionales –que sería la encargada de dictaminar– generó una reacción entre las fuerzas de oposición, que esgrimiera como argumento central la violación del artículo 72 de la Constitución.

El perredista Carol Antonio Altamirano recordó que ese artículo ordena que todo proyecto de ley o decreto cuya resolución no sea exclusiva de alguna de las cámaras se discutirá sucesivamente en ambas, observándose la Ley del Congreso y sus reglamentos respectivos sobre la forma, intervalos y modo de proceder en las discusiones y votaciones.

Altamirano presentará hoy al pleno una moción suspensiva para que el asunto se turne a una comisión para su dictamen, de acuerdo con el reglamento de la Cámara.

El presidente en turno de la Junta de Coordinación Política, el perredista Silvano Aureoles, informó que la mayoría de los integrantes de ese grupo de trabajo acordó la dispensa del trámite, mientras que él se opuso, junto con PT y Movimiento Ciudadano.

Los partidarios de la dispensa argumentaron que ante el inminente final del periodo de sesiones, es necesario acordar los mecanismos procesales legislativos para asegurar el desahogo del tema.

En el Senado, la discusión de la reforma concluyó el miércoles pasadas las 2:30 de la madrugada, tras lo cual se remitió la minuta a la colegisladora.

Los senadores hicieron tres modificaciones al dictamen, la más relevante de las cuales fue un cambio al artículo 51 constitucional, para definir la paridad de género en la integración del Congreso.

El panista Javier Corral introdujo el tema al debate, aunque la propuesta estuvo a cargo de su compañera de bancada Marcela Torres y la perredista Angélica de la Peña. Ambas consideraron un agravio que la obligación de que los partidos destinen a mujeres 50 por ciento de sus candidaturas al Congreso estuviera en un artículo transitorio. La propuesta se aprobó tras un largo debate.

En otra parte de la discusión, el panista Roberto Gil reivindicó la relección de legisladores acordada y sostuvo que no limita las candidaturas independientes. Se rechazó la propuesta del PAN para reducir el número de diputados y senadores y establecer un candado, a fin de impedir que los plurinominales puedan ser relectos por la vía de las listas de representación proporcional.

Armando Ríos Piter, del PRD, aclaró que él y parte de su bancada votaron en favor de la reforma política porque contiene avances importantes, y porque al final lograron el compromiso del PRI de dar vialidad a la consulta ciudadana.