Pieza del británico inspirada en la poeta acompaña exposición
Domingo 1º de diciembre de 2013, p. 6
Sor Juana Inés de la Cruz es una incitación para aprender español, señaló el compositor y pianista británico Michael Nyman (1944), quien inspirado en la Décima Musa retomó su Soneto 145 y creó una pieza musical para voz y teclado ex profeso para acompañar la exposición plástica Horizontes fracturados, que se exhibe hasta el 14 de diciembre en la Universidad del Claustro de Sor Juana (UCSJ).
Ha destapado algo en mí que me hace querer escribir toda una noche de música basada en textos de Sor Juana. Desafortunadamente sólo he podido leer en inglés un cinco por ciento de su obra completa. Ahora que he pasado tiempo con su obra es una invitación para aprender español para poder leer sus poemas
, expresó el músico durante una charla pública, donde reveló que trabaja en otras tres obras también con textos de la poeta, así como con armonías inspiradas en Johann Sebastian Bach.
Al entrar a las ruinas de la celda que alguna vez habitó Sor Juana, una música lenta y aire barroco, con una voz de soprano, recibe al visitante en el espacio en penumbra donde exponen tres artistas en tributo a la escritora del siglo de Oro Español: Lorena Camarena, Magali Ávila y Aurora Noreña.
Nyman y cuatro mujeres en la mesa conversaron este sábado sobre el proceso de creación de las obras que hacen una mirada contemporánea a la figura de Sor Juana y que fue inaugurada en octubre pasado. El destino y el azar quedaron manifiestos durante la conversación en la que participaron las tres artistas plásticas, la curadora Berta Kolteniuk y Michael Nyman, como parte del ciclo Diálogo con los artistas.
Estoy en posición muy diferente de quienes colaboraron en esta exposición porque son mujeres, pero más porque son mexicanas y yo no. He visto que cada mexicano con un poco de sofisticación sabe acerca del trabajo de Sor Juana. Como gringo hay cosas que sabemos sobre México, por ejemplo Diego y Frida, pero hay ciertas cosas que no conocemos. Pude estar sentado 65 años de mi vida en Londres y nunca saber sobre ella
, expresó en el auditorio Narciso Divino.
Éste que ves, engaño colorido,/ que, del arte ostentando los primores,/ con falsos silogismos de colores/ es cauteloso engaño del sentido
dicen los primeros versos que conforman la base de la canción escrita por Nyman. El Soneto 145 fue una elección al azar, relató. Casualmente, Magali Ávila también eligió el mismo poema para realizar un video y una pieza escultórica.
En los cinco años que Nyman ha vivido en México una de las cosas que le gusta es recorrer librerías. Así encontró el libro Las trampas de la fe, de Octavio Paz, sobre la figura de la monja que vivió en el siglo XVII. Al leer unas cuantas páginas fue suficiente para saber que le gustaría participar en algún proyecto conectado con su obra. Por eso, cuando recibió la invitación de Camarena, aceptó. Esta exposición prueba que mi vida en México es una semilla que he sembrado y que sé de alguna manera va a empezar a florecer y rendir fruto
, afirmó.