El presidente del Senado, el priísta Raúl Cervantes, pidió al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, el auxilio de la fuerza pública a fin de que se garantice que en esa cámara legislativa podrá discutirse la reforma energética, uno de los temas de la agenda aún pendientes.

No detalló cuándo se tiene programado comenzar la discusión de la reforma energética, aunque son cada vez mayores las versiones de que la intención del PRI y parte del PAN es votar la modificación de los artículos 27 y 28 constitucionales, la próxima semana.

El senador Rabindranath Salazar del PRD dijo que preguntó al presidente de la Comisión de Energía, David Penchyna, por esas versiones y le pidió que le confirmara si es verdad que ya hay un dictamen de la reforma energética, lo que el priísta negó.

El perredista señaló que la fracción del PRD está atenta ante cualquier intento de albazo el martes próximo, inmediatamente después de que se apruebe la reforma política.

Por separado, el senador Cervantes explicó que ante la amenaza de manifestaciones y bloqueos a la sede senatorial, por quienes se oponen a esa reforma, le hizo llegar un escrito a Mancera, y dijo que el jefe de Gobierno está en la mejor disposición de dar las garantías necesarias para que podamos sesionar, como ocurrió con la discusión de las reformas laboral y educativa, donde también hubo inquietud social.

El senador Ernesto Cordero del PAN sostuvo que no hay plazos fatales y que no es forzoso que la reforma energética se apruebe en este periodo de sesiones que concluye el próximo 15 de diciembre.

No hay ningún plazo que nos obligue a legislar este periodo o el siguiente, lo que debe preocupar es que tengamos una reforma energética profunda, de a deveras, que transforme realmente, y no como la que propone el PRI.