Buenos Aires, 20 de noviembre.

En una emotiva ceremonia, la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner regresó hoy a la gubernamental Casa Rosada, después de un mes y diez días de licencia médica, para tomar juramento a los nuevos ministros designados el lunes pasado cuando retomó sus funciones, y llamó a la unidad de todos los argentinos, en un discurso ante miles de jóvenes militantes que ocuparon la planta baja del edificio presidencial.

La mandataria estuvo acompañada por todo su gabinete, gobernadores, funcionarios, representantes sindicales, profesionales, organismos de derechos humanos y otras personalidades. Alrededor de la Casa Rosada centenares de jóvenes también festejaban el retorno de la mandataria.

Entre los anuncios más fuerte en su regreso figuró precisamente el nombramiento de Jorge Capitanich, quien era hasta ahora gobernador de la provincia del Chaco, como jefe de Gabinete, remplazando a Juan Manuel Abal Medina.

En otro nombramiento importante, como Ministro de Economía designó a Axel Kicillof, hasta ahora viceministro de esa cartera y en remplazo de Hernán Lorenzino, quien será embajador ante la Unión Europea y tendrá a su cargo la oficina de negociación en el tema de la deuda.

Asimismo nombró ministro de Agricultura a Carlos Casamiquela, un connotado profesional que estaba a cargo del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria.

A todos tomó juramento, acompañada por los sostenidos aplausos de la concurrencia. La mandataria, de 60 años, llegó en automóvil, ya que por ahora no puede viajar en helicóptero. Estaba vestida con una blusa negra y una falda en varios tonos, alivianando su luto, como sucedió en su primera aparición televisiva, el lunes pasado.

Después de la toma de juramento salió a los balcones interiores visiblemente emocionada, pero relajada.

Cuánto los extrañé, por Dios, dijo a la marea de jóvenes que colmaron el Patio de las Palmeras, los que le respondieron con cánticos y agitando banderas. Hemos vuelto a enamorar a muchísimos jóvenes que se han vuelto a acercar a la política, dijo durante su discurso, que se extendió ante el impacto que le produjo el rencuentro con los jóvenes, en su primer acto público, tras la cirugía craneal.

Destacó destacó la importancia de recuperar la industria nacional, como un hecho de soberanía, así como el resurgimiento del aparato productivo nacional y la baja de desempleo que en las últimas cifras registró un descenso al 6.8 por ciento. También recordó las nuevas estaciones de Ciencia y Tecnología, recién inauguradas como una afirmación de soberanía nacional y los avances en educación. En este punto mencionó la promesa de mi querida amiga Michelle Bachelet -quien resultó ganadora en las pasadas elecciones de Chile pero irá a una segunda vuelta- de que uno de los primeros pasos será el de la educación gratuita.

Así fue refiriéndose a todos los avances en el país que significan restitución soberana habló de las recientes compras de nuevos trenes para el transporte urbano en esta capital y sus alrededores y se comprometió a reinstalar los trenes de carga, como una forma de bajar costos de transporte y activar las comunicaciones marítimas.

Alentó a profundizar el modelo y a no dejarse robar la utopía y las esperanzas.

En este aspecto recordó que hay que superar las sensaciones de impotencia tenemos recursos humanos, capacidad, voluntad y sobre todo decisión política.

Destacó la recuperación de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), que fue la empresa que más ganancias tuvo este año y se comprometió a restituir la soberanía energética, al advertir que se harán inversiones necesarias, pero bajo el control del Estado.

En este punto hizo un llamado en un momento tan especial de nuestra patria, en un mundo diverso, conflictivo, queremos que los argentinos unamos esfuerzos, con los trabajadores, con los empresarios que han logrado mucha rentabilidad.

Recordó que Argentina “salió del infierno y está sólida económicamente y por eso la mejor contribución que tenemos que hacer todos los argentinos es dejar de lado las agresiones y discutir ideas (…) este es el gran compromiso democrático que necesitamos para que todo nuestro esfuerzo siga valiendo la pena”.

En medio de cánticos la mandataria se despidió, pero regresó al lugar para un segundo y breve discurso porque se había olvidado de mencionar el significado que ha tenido la recuperación de Aerolíneas Argentinas.

Los nuevos ministros

Este día renunció el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, uno de los funcionarios más perseguidos por la oposición. Peronista desde siempre, el alejamiento del economista fue comentado con respeto por muchos funcionarios ya que se enfrentó a los sectores más poderosos del país, e incluso con el Grupo Clarín, por el tema de Papel Prensa. Moreno estuvo desde el año 2006 en distintos cargos.

Kicillof, de 42 años, destacado como un brillante licenciado y doctor en Economía, formado en Ciencias Sociales. Viene de una fuerte militancia estudiantil de izquierda en los años 90 y ocupó cargos muy importantes en el área de Economía, hasta ser viceministro de esa cartera, recordó el analista Luis Bruchstein. Estuvo al frente del Plan Procrear de viviendas que es un gran avance. Con una sólida formación que todos reconocen, investigador, docente, con varios libros editados, estuvo también en el armado de la recuperación de YPF, entre otros cargos importantes.

Capitanich, de 48 años, es un militante peronista de toda la vida, como señala Bruchstein lleva dos períodos como gobernador de Chaco y en las últimas elecciones legislativas logró más de 60 por ciento de los votos. Fue senador nacional y tuvo importantes cargos e incluso brevemente en 2002 cuando fue jefe de gabinete, en medio de la crisis.