La falta de profesionalización de todos los eslabones de la cadena de justicia puede hacer que la aplicación del modelo oral y acusatorio fracase, al repetir los vicios del anterior esquema, advirtióÉdgar Cortez, investigador del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia.

Luego de que el pasado 11 y 12 de noviembre dicho colectivo organizara el seminario Servicios periciales ante el sistema penal acusatorio en México –con el apoyo de la Unión Europea–, dirigido a peritos y médicos forenses, Cortez advirtió que la puesta en marcha del nuevo modelo de justicia depende del nivel de capacitación que tengan los funcionarios.

Los servicios periciales y forenses van a ser esenciales en el nuevo sistema, porque son los que tienen las posibilidades y la experiencia para generar pruebas científicas y objetivas. Si no se les atiende y se les forma con recursos suficientes, hay un alto riesgo de que el sistema penal fracase o mantenga muchas deficiencias, enfatizó.

Además de dichos servicios, dijo el especialista, es fundamental capacitar a los funcionarios que se desempeñan en otras áreas de la cadena de procuración de justicia, pues si no hay un abordaje integral de todo el aparato, la buena actuación de una sola parte no provocará mejores resultados por sí misma.

Los primeros en llegar a la escena de un crimen son los policías estatales o municipales, pero si no están preparados para resguardarla y evitar que se contamine, el perito no va a poder hacer su trabajo en condiciones adecuadas, señaló Cortez.

De igual forma, dijo, si no hay un agente del Ministerio Público que dirija adecuadamente la investigación mediante una teoría del caso, los esfuerzos del resto de integrantes del aparato serán inútiles.

Si no cuidamos todos estos aspectos, el sistema penal acusatorio puede fracasar, y en general ya vamos muy atrasados en su aplicación. La fecha límite para que entre en vigor es 2016, y hasta ahora sólo hay tres estados donde se aplica, más otros nueve o 10 donde ya se aplica parcialmente, alertó.