El compositor argentino presentará hoy Copos de Sol en la UACM
Martes 12 de noviembre de 2013, p. a10
“Lo que a mí me interesa es que el arte cumpla un papel liberador como parte de una guerra cultural, de la cual soy partícipe desde hace mucho tiempo”, expresó en entrevista el cantante, compositor y guitarrista argentino Javier Peñoñori, quien hoy martes presentará su nuevo disco, Copos de Sol, en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, plantel Del Valle, en el foro Gregorio Selser, a las 19 horas; la entrada es gratuita.
Aseveró que entiende su trabajo como militancia del arte. “Algunos le llaman batalla, pero yo le llamo guerra cultural, dirigida a que se logre algo que todos soñamos: vivir dignamente, que es lo que nos merecemos las mayorías populares de los países de nuestro continente”.
–En esta guerra, ¿quién es el enemigo?
–El imperio, Estados Unidos, por más que quiera decir lo contrario. Es inocultable e insoslayable, y tiene un gran poder dentro de las Naciones Unidas, un poder de veto. Puede fabricar cualquier invasión, como en el caso de Irak. Ahora intenta hacer lo mismo con Siria. No hay una zona en el mundo que Estados Unidos no considere área estratégica… incluso las Malvinas.
En Argentina hemos logrado en los recientes 10 años reducir la desocupación laboral, bajarla a 6 por ciento. Se han hallado yacimientos de petróleo que están siendo manejados por el Estado. La última ley, que celebramos, es la de medios de comunicación, de audiovisuales. Las cosas estaban como cuando la dictadura y un solo medio controlaba 400 empresas que usaban para controlar y manipular a toda una población. Hay avances, aunque no todo es de color de rosa. El único que no quería acatar la ley era el grupo Clarín, que maneja el precio del papel de los diarios. El papel prensa lo maneja porque la dictadura se lo regala.
–¿Cuál es la participación de los cantantes, de artistas como usted, en este contexto?
–La mayoría están porque se profundice y amplíe el proyecto popular, para que sea nacional. La inmensa mayoría de los artistas son críticos y hablan el lenguaje que uso en este momento. Son defensores que opinan sobre lo que les gusta o no de lo que hace el gobierno, al contrario de lo que señala la oposición.
A mis 52 años, puedo decir que me hice militante a la par de usar la guitarra. Milité en la Juventud Peronista y en otra época en el Partido Comunista. Estudié ciencias exactas y después sociología. Admiro mucho al filósofo Enrique Dussel, por lo que ha hecho con su militancia y sus escritos sobre filosofía y liberación.
El cantante, de apellido vasco, ha grabado a la fecha nueve discos; el primero es 1986. “Nunca me ha preocupado eso de la cantidad de discos, pues los concibo como libros. Publiqué un poemario que se llama Murmullo del silencio, de edición independiente.”
Presentarse en México, consideró, es sumarse a un colectivo, que comparte las mismas ideas. “Es necesario enfrentar la política neoliberal, que miente a la gente para seguir fortalecida como minoría ricachona. En mi nuevo disco reivindico a Tupac Amaru, en un huayno de mi autoría e incluyo obras de él. Son en total 13 piezas y ocho son mías. Hay un poema, Liberar la palabra, donde trato de la importancia de la ley de medios en Argentina, porque ahora los pueblos originarios cuentan con sus propias radios, que transmiten en sus propias lenguas, como el quechua o el aimará. Tener voz es una guerra cultural, porque es un derecho ser escuchados después de tanto tiempo de ser silenciados de distintas formas.
La guitarra y las historias
El concierto va a ser a una guitarra, con la historia de cada canción, algo de tango y de clásico, en ese orden. Si hay algo de positivo en lo que trajeron los españoles, uno es la guitarra y otro es el idioma. La guitarra la hemos latinoamericanizado y he tenido la suerte de tener un maestro como Atahualpa. No soy quién para decirlo y prefiero que el público opine sobre el modo de tocar el instrumento. En mis conciertos trato de que quede claro que en la actualidad en nuestros pueblos hay dos morales: una, la de los ricachones, que son la minoría y sojuzgan, dueñas de todo, y la de las mayorías, que merecen un arte que contribuya a la libertad, a su libertad, y libertad para seguir creando.
Javier Peñoñori también se presentará el 19 de este mes en Contigo América, en Arizona 156, colonia Nápoles, a las 19 horas. Entrada, 120 pesos.