Requiere 7 millones de dólares para financiar la temporada, informan
La segunda casa de ese arte en la Gran Manzana, está en peligro de desaparecer
Terrible, que una metrópoli tan grande y rica no pueda apoyarla, deplora el tenor Plácido Domingo
Martes 1º de octubre de 2013, p. 5
Nueva York, 30 de septiembre.
La Ópera de la Ciudad de Nueva York, la segunda detrás de la Metropolitana, parecía condenada el lunes a declarar su quiebra, ante la imposibilidad de recaudar los 7 millones de dólares necesarios para financiar su temporada.
Vamos a anular nuestra temporada y presentar la quiebra si antes del lunes a medianoche no tenemos los fondos para financiar este año
, advirtió el fin de semana su director artístico, George Steel. El lunes por la mañana, la ópera solo había obtenido 2 de los 7 millones necesarios.
La Ópera de la Ciudad de Nueva York, denominada la Ópera del pueblo
, fue creada en 1944 con la finalidad de volver este género más accesible con precios razonables.
Fue en esta ópera que el español Plácido Domingo o la soprano estadunidense Beverly Sills lanzaron sus carreras en los años 60.
Pero desde hace años se enfrenta a dificultades financieras persistentes y el consejo de administración decidió la semana pasada que presentaría la quiebra luego del lunes si no se conseguía el dinero en cuestión.
La mala gestión del teatro y la crisis económica que atañe a Estados Unidos son parte de esta quiebra, por lo que Nueva York dejará de integrar el selecto club de las grandes capitales conformado por Londres, Berlín, Moscú, Viena o París, detallaron medios locales.
¿La última función?
La representación del sábado por la noche de Anna Nicole, en la Academia Musical de Brooklyn, estuvo cargada de gran emoción y algunos músicos no pudieron contener las lágrimas al saludar a una sala abarrotada de espectadores quienes se pusieron de pie y aplaudieron durante 10 minutos, en lo que habría sido la última velada de la ópera.
Plácido Domingo lamentó esta muerte anunciada. Soy uno de los muy numerosos cantantes que recibió una formación e impulsos esenciales de esta compañía durante sus 70 años de existencia
, declaró al Wall Street Journal. Es terrible que una ciudad tan grande y tan rica como Nueva York no pueda apoyar una segunda ópera
.
El tenor español enfatizó en un comunicado que las primeras interpretaciones en la Ópera de Nueva York fueron las que realmente lanzaron mi carrera internacional y veo esos días de mi vida con gran orgullo
, publicó el diario digital The Huffington Post.
Por otro lado, esta situación llevó al director belga Gerard Mortier a renunciar en 2008 por los problemas presupuestarios existentes en esa agrupación musical, tras firmar un año antes para incorporarse a las actividades de la temporada 2009-2010.
La Ópera de la Ciudad de Nueva York, que también ofrece programas educativos a miles de niños, fue parte del Lincoln Center desde 1966 hasta 2010, pero sus problemas financieros la llevaron luego a instalarse en el sur de Manhattan y a disminuir notablemente su producción.