La presencia humana en Cuba data de hace unos 8 mil a 10 mil años, muchos miles después que en otras partes de América; los primeros pobladores llegaron desde el continente a la isla tras arriesgadas travesías marinas, según arqueólogos.

Hasta el momento han sido localizados más de 3 mil 200 sitios arqueológicos aborígenes en la isla, informó este sábado la agencia cubana Prensa Latina, al citar a dos expertos del Instituto Cubano de Antropología, que prepara un nuevo Censo Arqueológico Aborigen de Cuba.

La presencia humana aborigen en Cuba data hipotéticamente de hace 8 a 10 mil años, tras un poblamiento tardío y posterior al de América, iniciado aproximadamente 39 mil años atrás, agregó la agencia, de acuerdo con los arqueólogos José Jiménez Santander, encargado del Censo, y Alfonso Córdova, jefe de Arqueología del Instituto de Antropología.

Arqueólogos cubanos dijeron hace cinco años que los primeros habitantes de Cuba llegaron hace unos 7 mil años.

Los primeros humanos llegaron a la isla tras arriesgadas travesías marinas desde el continente, dijo la agencia.

De los sitios arqueológicos encontrados en Cuba, algunos sirvieron de habitaciones, por la presencia de restos de comidas y de fogón, junto a otras evidencias de instrumentos de trabajo y desperdicios, que dan cuenta de que esas antiguas comunidades vivieron allí durante algún tiempo, indicó Jiménez.

Otros fungieron de paraderos, pues son áreas también con evidencias, pero no de vida prolongada, hechos sobre todo por comunidades transhumantes que se movían periódicamente, pero repetían las estancias; así como cuevas habitadas, apuntó Jiménez.

Agregó que en la isla hay vestigios del uso de cuevas para ceremonias, cementerios, áreas de enterramientos, estaciones de pinturas rupestres, conchales, talleres de conchas para hacer vasijas y guvias, y otros objetos.

Hace cinco años, antropólogos de la Universidad de La Habana dijeron que los aborígenes más antiguos de Cuba y las Antillas Mayores vivieron hace unos 7 mil años en la zona de Canímar Abajo, muy cerca del famoso balneario de Varadero, 140 kilómetros al este de La Habana.

Este sitio arqueológico, con más de 100 despojos de aborígenes, fue descubierto de manera fortuita dentro de un campamento en 1984, cuando unos empleados hicieron una excavación para enterrar basura.