Sábado 23 de febrero de 2013, p. 16
El presidente Francisco I Madero no sólo fue un demócrata sino también un patriota, pues fue el primero que impuso obligaciones fiscales a las empresas petroleras, dijo ayer el dirigente del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Martí Batres.
Momentos antes de montar una guardia de honor y colocar una ofrenda floral en el lugar donde fue asesinado Madero y el vicepresidente José María Pino Suárez –en las inmediaciones del antiguo palacio negro de Lecumberri–, expuso que desde la época revolucionaria y hasta la fecha, las empresas petroleras trasnacionales han presionado con los mismos argumentos para quedarse con la riqueza que produce el energético.
Recordó que los periódicos de aquellos años decían que el artículo 27 constitucional era un lastre para el desarrollo, y hoy las empresas trasnacionales y sus voceros dicen lo mismo, como si esas compañías quisieran el desarrollo del país. Lo que en realidad anhelan es llevarse la riqueza petrolera a sus metrópolis. No quieren el beneficio de México, sino el propio, enfatizó.
Acompañado de integrantes del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, como Berta Luján, secretaria general, y Pablo Moctezuma, secretario de estudios y proyectos, Batres Guadarrama subrayó la importancia de defender el petroleo mexicano como palanca del desarrollo nacional, ya que aporta 40 por ciento de los ingresos de la Federación.
A 100 años de la muerte de Madero, recordó, por último, que las empresas petroleras trasnacionales participaron en la conspiración que derrocaría al apóstol de la democracia.