Los bancos mexicanos comenzaron a registrar un incremento en la morosidad en los préstamos al consumo y personales, realidad que hasta ahora no había sido reconocida y sobre la que la firma calificadora Fitch lanzó este jueves una alerta amarilla.

El monto de castigos de crédito que deben realizar los bancos que operan en México está aumentando rápidamente en el segmento de consumo, tanto en tarjetas de crédito como préstamos no revolventes, impulsados por el rápido crecimiento en estas líneas de negocio durante los últimos 12 a 18 meses, señaló Fitch en un reporte presentado este jueves por Franklin Santarelli, director del grupo de instituciones financieras latinoamericanas de la firma calificadora de inversiones.

El término castigo hace alusión a una operación contable consistente en dar el tratamiento de pérdida a una cantidad originalmente registrada como activo (los bancos registran los créditos que otorgan como parte de sus activos). Esta medida la puede tomar un establecimiento de crédito al cerciorarse de la irrecuperabilidad de un préstamo, decisión que de ninguna manera libera a la entidad acredora del deber de continuar con el cobro de las sumas comprometidas.

Para los bancos con actividades en México, el entorno económico tiene una buena perspectiva, de acuerdo con la calificadora. Fitch anticipó para 2013 un crecimiento del producto interno bruto de 3.6 por ciento, dos décimas de punto menos que el de 2012. El país, consideró, mantendrá una moderada recuperación tras la recesión de 2009. El crecimiento del crédito, que ha sido en torno a 15 por ciento en los últimos dos años, es a un ritmo que la firma considera sostenible sin afectar los sólidos fundamentos de la banca.

Los bancos han mantenido buenas ganancias a pesar del complejo entorno y las bajas tasas de interés recientes, expuso.

La semana pasada, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) informó que el conjunto de la banca privada obtuvo en 2012 utilidades por 87 mil 126 millones de pesos, monto histórico para un año, y 20 por ciento superior a las obtenidas en 2011.

Aun en un entorno de crecimiento económico y aumento de la rentabilidad, Fitch anticipó que la calidad de los activos de los bancos en México enfrentan un potencial de deterioro. Apuntó: Fitch espera un debilitamiento moderado y gradual de la calidad de los activos ante la reactivación crediticia reciente, sobre todo en consumo. La morosidad y las provisiones se mantienen bajos, pero los castigos en tarjetas de crédito y otros productos de consumo están aumentando rápido, especialmente cuando estas líneas de negocio han crecido al doble que otros sectores y tienen costos crediticios históricos elevados

La cartera de crédito vencida en préstamos al consumo llegó en diciembre pasado –último dato disponible– a 28 mil 159.5 millones de pesos, 38 por ciento más que un año antes, de acuerdo con información de la CNBV.