París, 5 de febrero. El británico John Galliano, despedido de Dior por declaraciones antisemitas hace dos años, volvió a sacudir el mundo de la moda al entablar una demanda contra la histórica casa y ganarle un primer asalto el lunes en una corte laboral de París, confirmó el martes la abogada del modista.

El genio de la moda, despedido en marzo del 2011 después de que profirió declaraciones racistas en un bar de París, en estado de ebriedad, alegó ante la corte que la rescisión de su contrato había sido improcedente. Y el tribunal aceptó examinar la demanda, indicó la abogada de Galliano, Chantal Giraud van Gaver.

Dior perdió en el tribunal laboral porque su estrategia de alegar que Galliano no era empleado de la casa está equivocada, explicó la abogada del talentoso y controvertido modista británico.

El diseñador –que ha estado sometido a una cura de su desintoxicación, tras ser condenado en setiembre del 2011 por un tribunal en París a pagar una suma simbólica– fue también despedido de su propia marca John Galliano, que pertenece al mismo grupo de lujo francés que la firma Christian Dior, LVMH.

Desestiman argumentos

Durante la audiencia del lunes, el tribunal de Relaciones Laborales desestimó el alegato del abogado de Dior, Jean Néret –representante también de la marca John Galliano–, quien declaró que esa corte no podía tratar el caso porque el diseñador era más bien un trabajador independiente y no un empleado de Dior, reveló la revista especializada de moda Women’s Wear Daily (WWD). La abogada ha dejado en claro que Dior no puede tratar a Galliano, que dirigió las colecciones femeninas de la casa durante 15 años, de trabajador independiente o consultor externo.

En sus declaraciones insistió que Christian Dior no tenía base para alegar que su ex modista estrella, que dirigió las colecciones femeninas de esa casa durante 15 años, no era uno de sus empleados.

Dior no puede impugnar la existencia de un contrato de trabajo, ante toda la evidencia, subrayó Giraud van Gaver.

La abogada no precisó la suma de la demanda presentada por Galliano, cuyos desfiles en la división alta costura y prêt-a porter de Dior eran los más aplaudidos. Sin embargo, dio a entender que es cuantiosa.

Galliano ha ganado mucho dinero, y lo que pide está en proporción a eso. Ello significa mucho dinero, subrayó.

En la audiencia se divulgó el salario fijo bruto del diseñador en Christian Dior Couture, que ascendía a un millón de euros.

Además, el creador nacido en Gibraltar ganaba dos millones de euros de director artístico de su propia marca John Galliano, 91 por ciento de la cual pertenece a Dior Couture.

La revista WWD indicó también que Dior acordaba a Galliano un presupuesto para su cuidado personal de unos 77 mil 700 dólares, y otro para su vestimenta, de unos 30 mil euros.

Sin embargo, en el video que motivó su despido, en el que se veía insultar a una pareja en un bar del barrio Le Marais, y se le escuchaba gritar Amo a Hitler, se le observaba no sólo ebrio, sino descuidado.

Ante el tribunal penal de París que lo juzgó por sus declaraciones antisemitas, Galliano confesó que sufría de una triple adicción: al alcohol, los somníferos y el Valium. Después de eso se sumió en el silencio y desapareció de los reflectores.

Pero ahora el modista vuelve a dar de qué hablar, y las fotografías lo muestran sonriendo.

Sin embargo, faltan aún largos meses para que su demanda sea examinada, ya que la primera ronda que ganó el lunes sólo significa que el tribunal laboral francés ha admitido que está calificado para escuchar en una vista sus alegatos concernientes a su despido de Dior.

Dior tiene ahora 15 días para apelar el fallo de la corte parisina. Lo cierto es que Galliano –cuyo despido se produjo después de que se divulgara un vídeo que provocó conmoción en Francia y en el mundo –sigue dando qué hablar, y el nuevo caso en el que está envuelto hará correr otra vez ríos de tinta.

Además, su éxito en la audiencia de ayer se suma el que obtuvo hace unas semanas, cuando fue invitado a trabajar en Nueva York por el exitoso diseñador dominicano Óscar de la Renta.