El Estado laico en el país está en peligro ante la embestida actual de diversos sectores que pretenden abatirlo, advirtieron especialistas universitarios en un seminario.

Una de las intenciones de contravenir ese principio constitucional es que en 18 entidades de la República existan leyes que criminalizan a la mujer y el derecho a decidir sobre su cuerpo, se dijo durante la inauguración del seminario Laicidad y Educación, efectuado en el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que marcó el inicio de las actividades de la cátedra extraordinaria Benito Juárez.

Tras la inauguración del seminario, el rector José Narro Robles lamentó que las mujeres no gocen de los mismos derechos en todos los estados y que en algunos casos sean criminalizadas.

Lamento que tengamos mujeres y niñas a las que no se les puede respetar en toda su capacidad como mujeres, o niños a quienes no damos la instrucción necesaria, o parejas para las que todavía no hay servicios suficiente para impulsar verdaderamente la salud reproductiva.

En entrevista, afirmó que hay una tarea pendiente para el Estado en su conjunto: la educación y la prestación de servicios de salud reproductiva, a lo que se deben sumar los textos jurídicos necesarios para tutelar los derechos de todos los sectores, incluidos mujeres y niños.

Al ser interrogado sobre el peligro de retroceso en la laicidad, el rector respondió: Todo lo que es un elemento delicado, sensible, que está en los fundamentos de la articulación de una colectividad de esta naturaleza siempre está en riesgo. Pero se los he dicho muchas veces, soy muy optimista y estoy convencido que en este tema no puede ni debe retrocederse, pero tampoco será fácil dar marcha atrás.

Previamente, en la ceremonia inaugural, Narro Robles subrayó que la laicidad es sinónimo de libertad, pluralidad y tolerancia. Por ello debe estar presente en todos los niveles educativos como uno de los grandes asuntos a impulsar y tutelar.

En la medida en que tengamos ciudadanos preparados e informados, capaces de ejercer sus derechos y de cumplir con sus responsabilidades y obligaciones, y en la que apertura y tolerancia formen parte de la vida cotidiana, contribuiremos a que la sociedad mexicana sea mejor, apuntó.

Fue el constitucionalista Diego Valadés, integrante del IIJ, quien puso sobre la mesa uno de los recientes golpes a la laicidad: que en más de la mitad de las entidades de la República se hayan modificado las constituciones locales para criminalizar y encarcelar a las mujeres que por algún motivo abortan. Advirtió que en tres estados más (Aguascalientes, Sinaloa y Zacatecas) ya se preparan modificaciones constitucionales en ese sentido.

No nos ha sido posible identificar el número exacto de las mujeres que están siendo privadas de su libertad y procesadas por homicidio calificado, en virtud de las reformas introducidas a 18 constituciones de los estados que lesionan los derechos del sector femenino en cuanto a sus capacidades y derechos reproductivos.

Planteó que desde la cátedra extraordinaria Benito Juárez debe estudiarse estos casos con el apoyo que nos da actuar de una forma seria, responsable, serena, imparcial y ajena a preocupaciones políticas.

Por su parte, Luis Raúl González Pérez, abogado general de la UNAM, citó varios de los conceptos sobre laicidad del conotado constitucionalista Jorge Carpizo, fallecido el año pasado, quien la definía como un principio irrenunciable y como la capacidad de cada persona de pensar por cuenta propia.

Rodolfo Echeverría, académico de la cátedra extraordinaria Benito Juárez, indicó que el Estado laico está en peligro, ya que no cejan ni cejarán las embestidas abiertas u ocultas dentro y fuera del país que pretenden abatirlo.