Son insuficientes las notas diplomáticas que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) ha presentado ante el gobierno de Washington para protestar por la violencia y asesinato de connacionales en la frontera norte y en el interior de Estados Unidos, afirmó la presidenta de la Comisión de Asuntos Migratorios de la Cámara de Diputados, Amalia García, quien indicó que es momento que el gobierno de Enrique Peña Nieto proponga al de Barack Obama una iniciativa para detener las acciones de odio contra los migrantes mexicanos y se garantice el respeto a sus derechos fundamentales.

En entrevista con La Jornada, la diputada del PRD destacó que Obama, tras ser relecto, anunció una reforma migratoria. Ante ello, dijo, es importante que el gobierno de Peña no espere a saber su contenido, sino fijar previamente una postura.

La llegada del nuevo gobierno representa el momento justo para plantear, con mucha precisión, cuál será el tono y las condiciones de la relación entre México y Estados Unidos en materia migratoria; en el centro de dicha relación se debe buscar el respeto absoluto y recíproco a los derechos de los migrantes, tanto en la frontera común como en territorio estadunidense, dijo.

Recordó que, como cada año, en enero se reúnen los cónsules de México en Estados Unidos. En esa coyuntura se debe fijar una posición del gobierno federal respecto de los hechos tan brutales e inaceptables que se han dado contra los connacionales, entre ellos diversos asesinatos por agentes de la Patrulla Fronteriza.

Sobre los hechos de violencia fronteriza, la SRE hizo llegar a los legisladores un documento en el que plantea que insistirá ante las autoridades competentes en la necesidad de respetar el marco de colaboración establecido entre ambos países para evitar la violencia.

En respuesta a diversos puntos de acuerdo, aprobados por las cámaras de Diputados y Senadores por la muerte del mexicano Guillermo Arévalo Pedroza, a quien balearon agentes de la Patrulla Fronteriza, la SRE dijo que ha dado seguimiento a las investigaciones relacionadas con los incidentes que involucran abuso de las fuerzas policiales estadunidenses y ha impulsado diversos entendimientos con Estados Unidos con miras a evitar más incidentes violentos.

La cancillería mexicana hizo alusión a la Declaración Conjunta México-Estados Unidos sobre Prevención de la Violencia en la Región Fronteriza, en 2010. También informó que en 2011 se adoptaron protocolos para la prevención de la violencia fronteriza, y aseguró que se trabaja para asegurar su plena implementación por las autoridades de ambos países.

La legisladora del PRD sostuvo que ya es necesario pasar a la acción para evitar más hechos violentos; por ejemplo, contratar abogados que lleven los juicios en defensa de connacionales y exigir que agentes de la Patrulla Fronteriza sean procesados y luego sentenciados por los asesinatos y abusos cometidos.

La ex gobernadora de Zacatecas refirió que mientras persista la impunidad –ni siquiera se conocen los nombres de los agentes que han asesinado a varios mexicanos–, se seguirán presentando los ataques y asesinatos, los cuales ya no sólo ocurren en la frontera norte, sino en diversos estados del vecino país donde se han aprobado leyes que propician acciones de odio y xenofobia.

México debe plantear una iniciativa antes de que se dé a conocer la reforma de Obama, insistió, tras señalar que se requiere plantear un acuerdo bilateral que garantice la integridad física de los mexicanos, así como el respeto absoluto a sus derechos humanos, la salud, la educación y otros.