Cuarenta por ciento la han sufrido en su familia de origen, señala un análisis de sondeos
De acuerdo con una encuesta, más de 500 mil fueron obligadas a contraer matrimonio
Miércoles 2 de enero de 2013, p. 31
La violencia física en la familia forma o ha formado parte de la cotidianidad de dos de cada tres mexicanas en algún momento de sus vidas, revela un análisis de las tres ediciones de la Encuesta nacional sobre la dinámica de las relaciones en los hogares (Endireh) –2003, 2006 y 2011– realizado por investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y publicado por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).
De acuerdo con los sondeos correspondientes a 2006 y 2011, 40 por ciento ha experimentado violencia física directamente en su familia de origen, y entre 8 y 9.5 por ciento de mujeres unidas (de acuerdo con los tres sondeos) reportó padecer agresiones físicas durante la infancia. La Endireh 2011 sostiene que 8.8 por ciento la experimentó de forma frecuente, mientras 28.7 dijo haber recibido insultos o humillaciones en su familia de origen.
Las mujeres que están expuestas como testigos a situaciones de violencia física o emocional entre miembros de la familia invariablemente tienen mayor probabilidad de ser revictimizadas en etapas posteriores de la vida y es más probable que ejerzan violencia contra sus hijos. De esta forma se reproduce el ciclo de la violencia cada nueva generación
, subraya el análisis, titulado Retratos de la violencia contra las mujeres en México, coordinado por Irene Casique y Roberto Castro, del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la UNAM.
El estudio apunta que adolescentes y mujeres también sufren otros tipos de violencia por integrantes de sus familias, como uniones forzadas y compraventa con fines matrimoniales, lo cual ha llevado a unirse a más de medio millón de mexicanas, según las cifras de 2011.
De acuerdo con la Endireh, 1.5 por ciento empezó su última o actual relación porque sus padres las obligaron. En números redondos, fue el caso de alrededor de 334 mil mujeres hasta ese año.
En tanto, la cifra de mexicanas que indicaron que sus padres arreglaron sus uniones actuales a cambio de dinero era de aproximadamente 236 mil (0.74 por ciento).
Esas cifras son conservadoras, pues se refieren a su unión actual, habiendo estado 9.9 por ciento de mujeres unidas o casadas en más de una ocasión
, explica el estudio.
Además, las mexicanas también son violentadas por sus familias políticas, principalmente los suegros, quienes ejercen violencia patrimonial al despojarlas de sus bienes.
De las que indicaron que les habían quitado propiedades, 5.5 por ciento afirmó que habían sido sus suegros y 6.4 por ciento reportaron que las despojaron de documentos que acreditaban la posesión de algún bien.
El resto de las mujeres que habían padecido violencia patrimonial, según la Endireh 2011, señalaron que principalmente había sido su esposo.
Sobre la violencia hacia las mayores de 60 años, los resultados apuntan que también la padecen, la mayoría por sus familiares. El 13.5 por ciento padece violencia emocional, 10.7 sufre negligencia –abandono o descuido de las necesidades básicas de una persona– y 0.76 violencia física, siendo los principales agresores las personas con quienes viven.