En la iniciativa de Ley de Ingresos el gobierno federal solicita mantener el ISR en 30%
Prevé el Ejecutivo recabar $3 billones 576 mil millones; 4.4 por ciento más que en este año
Sábado 8 de diciembre de 2012, p. 9
Las tasas de impuestos que pagan empresas y personas no se incrementarán en 2013, aunque continuará la política de aumentos graduales a los precios de las gasolinas y la electricidad, de acuerdo con la propuesta de política fiscal hecha por el nuevo gobierno al Congreso.
En la iniciativa de Ley de Ingresos para 2013, entregada ayer en la Cámara de Diputados por Luis Videgaray Caso, secretario de Hacienda, el gobierno federal no plantea modificaciones sustantivas
a la legislación, normas y procedimientos que rigen el actual marco fiscal. Tampoco propone aumentos en gravámenes respecto a 2012.
Así, el próximo año –y si la propuesta es avalada por las cámaras de Diputados y de Senadores– las tasas máximas del impuesto sobre la renta (ISR) para empresas y personas se mantendrán en 30 por ciento. Hasta 2009 era de 28 por ciento, pero fue incrementada en dos puntos porcentuales; entonces se dijo que de manera temporal, para hacer frente al debilitamiento de las finanzas públicas ocasionado por la crisis financiera que estalló en el otoño de 2008.
En la propuesta de política fiscal hecha ayer por el gobierno de Enrique Peña Nieto, quien tomó posesión del cargo el sábado pasado, señala que a pesar de que la actividad económica en México ha mostrado tasas de crecimiento favorables, el entorno internacional plantea riesgos importantes
, por lo que se considera conveniente que se prolonguen las medidas adoptadas (a finales de 2009), las cuales han permitido evitar un debilitamiento estructural de las finanzas públicas
.
Con el mismo argumento, la iniciativa de Ley de Ingresos propone al Congreso que no se modifiquen las tasas que se cobran a las cervezas y alcoholes de mayor gradación, mediante los llamados impuestos especiales sobre producción y servicios (IEPS), que en aquel año también se elevaron para fortalecer los ingresos públicos
. Tampoco cambiará el impuesto al valor agregado (IVA).
Un precio que se ajusta gradualmente es el que cobra el sector público por los bienes que ofrece, como gasolina, electricidad o gas. En el proyecto de ingresos planteado por el gobierno federal se asienta que la política de tarifas para dichos bienes y servicios seguirá definiéndose a partir de criterios como la relación precio-costo, las cotizaciones de referencia internacional (variable que influye en los costos de la gasolina que importa el Estado para satisfacer la demanda interna) y la inflación. Así, abunda, para evitar impactos abruptos sobre los niveles de inflación, los ajustes que se apliquen serán periódicos y graduales
, con lo que se preserva la estructura tributaria de 2012.
Según la iniciativa presentada ayer por el Ejecutivo al Congreso, el sector público federal espera contar el próximo año con ingresos presupuestarios por 3 billones 576 mil millones de pesos, cantidad superior en 4.4 por ciento en términos reales –descontado el efecto de inflación– respecto a la Ley de Ingresos de la Federación aprobada por el Legislativo para 2012. Este crecimiento es superior al que se prevé para la economía, dado que la proyección de avance en el producto interno bruto de 2013 empleada en el paquete económico es de 3.5 por ciento.
Sin embargo, como en 2012 hubo ingresos mayores a los previstos, sobre todo por un precio del petróleo superior al estimado para la elaboración del presupuesto, en el documento entregado ayer se calcula que al cierre del ejercicio 2012 los ingresos presupuestarios serán de 3 billones 516 mil millones de pesos. De ser así, los ingresos de 2013 serán superiores en 1.7 por ciento en términos reales a los que se estima se registrarán este año.
Contratación de deuda y deducción de gastos médicos
El gobierno federal solicita al Congreso contratar deuda externa hasta por 7 mil millones de dólares en 2013; también pide autorización para emitir bonos de deuda en el mercado interno hasta por 415 mil millones de pesos. En el primer caso, se trata de una cantidad similar a la aprobada para 2012, y en el de la deuda interna, es un monto menor al de este año.
Una novedad que incluye el proyecto de Ley de Ingresos es que, de ser aprobada por el Congreso, las deducciones de impuestos por gastos médicos, hospitalarios y dentales, así como por transporte escolar, sólo serán efectivas si los contribuyentes realizan el pago de esos servicios a través del sistema financiero. Esto es, si pagan en efectivo ya no será aceptada la deducción fiscal de ese gasto.