El tricolor incumplió su palabra de aceptar mínimos controles para evitar abusos desde la SG
Gamboa pide la cabeza de Cordero por su papel durante la discusión de la ley de administración
por falta de quórumFoto Carlos Cisneros
Viernes 7 de diciembre de 2012, p. 12
La discusión del dictamen de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, por el que se acota la estructura del gobierno propuesta por el presidente Enrique Peña Nieto, provocó una trifulca en el Senado de la República, a tal grado que llevó a los legisladores del PRI a tomar por unos minutos la tribuna, a exigir la destitución del panista Ernesto Cordero y anunciar que un notario revisará el procedimiento legislativo, porque lo consideran ilegal.
El trámite quedó inconcluso, luego de que las bancadas de PAN, PRD y PT acudieron a una maniobra para reventar el quórum, y el presidente de la mesa directiva, Ernesto Cordero, levantó la sesión a las 16:40 horas, con el fin de evitar que el PRI ganara una votación por la que se suprimiría el último párrafo del artículo 27 de esa ley. Con ello se habría eliminado la facultad del Senado de ratificar los nombramientos de los dos principales jefes policíacos, que dependerán de la Secretaría de Gobernación.
Después de casi cuatro horas de discusión, la minuta se había aprobado ya en lo general, con 114 votos a favor, cuatro en contra y cinco abstenciones, pero el problema se dio cuando comenzó la votación en lo particular y el bloque opositor se dio cuenta de que su mayoría –de 66 legisladores– se había diluido porque cinco de ellos –cuatro del PRD y uno del PAN– no estaban presentes en la sesión.
La fracción del PRI había ganado ya la votación para someter a discusión su propuesta, con el argumento de que se requiere una reforma constitucional para que el Senado pueda ratificar al comisionado de Seguridad Pública y al secretario técnico de la Comisión de Seguridad Nacional.
Cordero subía y bajaba del podio para cabildear con el coordinador perredista, Luis Miguel Barbosa... entonces decidieron reventar el quórum. No salir de la sesión, pero no votar. Así lo hicieron, por lo que el tablero electrónico marcó 62 votos en favor de la propuesta del PRI y una abstención, pese a que había 123 legisladores en el salón.
De inmediato, Cordero señaló: no hay quórum, tengo la obligación de suspender la sesión
. Tocó la campanilla, que da por concluidos los trabajos, pero se olvidó de citar a nueva sesión. Panistas y perredistas comenzaron a salir del salón, entre gritos y reclamaciones de los legisladores del PRI y el Verde.
Casi lo agarran a golpes
Desde su escaño, el coordinador de la bancada del PRI, Emilio Gamboa Patrón, exigió a Cordero una rectificación del trámite y le hizo notar que él no había votado. Otro priísta, David Penchyna, le reclamó lo mismo y el panista dio la palabra a su correligionario Raúl Gracia, quien justificó su decisión.
Cordero pidió entonces que se contabilizara su voto en contra. Son 64, y de todas formas no hay quórum
, dijo, puesto que el mínimo legal son 65. Salió del recinto, entre gritos de ¡fuera, fuera!
que le lanzaron los priístas.
Hubo varios altercados entre blanquiazules y tricolores; el senador panista Francisco Domínguez trató de impedir el acceso de la prensa al recinto y agredió verbalmente al responsable de comunicación de la bancada priísta, Héctor Lie, quien introdujo al recinto a los reporteros. Estuvo a punto de golpearlo, pero intervinieron Penchyna y el propio Gamboa.
Toda la bancada del tricolor subió luego a la tribuna y permaneció ahí varios minutos, lapso en el cual entonaron el Himno Nacional y desde ahí Gamboa Patrón ofreció una primera conferencia de prensa, en la que calificó de atropello lo hecho por la oposición.
En conferencias por separado, Cordero sostuvo que cumplió con el reglamento, mientras sus correligionarios Héctor Larios y Javier Corral Jurado justificaron que no hubieran votado, aun estando presentes. Acusaron al PRI de no cumplir su palabra de aceptar los mínimos controles democráticos
para evitar abusos de poder desde la Secretaría de Gobernación.
Consideraron que el PRI no puede quejarse, dado que también acudió a romper el quórum no votando, como en enero de 2006, para evitar e inicio del juicio político contra el ex gobernador Mario Marín. Barbosa reivindicó también la medida, a la que tuvieron que acudir por la intransigencia del PRI, que no admite contrapesos a un poder autoritario
. Rechazó que los perredistas que faltaron a la sesión hayan sido maiceados. Se trata de Rabindranath Salazar, quien se reportó enfermo; Isidro Pedraza, que anda de viaje en Qatar; Adolfo Romero Lainas, quien estuvo en la sesión y luego se fue, y Sofío Ramírez, que se quedó en Oaxaca. El PAN no justificó la ausencia de José María Martínez.
Por la noche, Gamboa Patrón reprochó que Cordero haya bajado 60 y tantas veces de tribuna y dijo que en el PRI quieren que sea destituido de la mesa directiva.