Secretarios se ríen del Legislativo; no hay controles en comparecencias
Sábado 1º de diciembre de 2012, p. 17
Experto en asuntos de seguridad nacional, Edgardo Buscaglia advirtió a senadores que la falta de controles legislativos origina que funcionarios, como el hasta ayer secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, haya podido reirse en la cara de un Poder del Estado
, como lo es el Senado.
Buscaglia impartió ayer la conferencia Evolución de la seguridad humana y sus perspectivas, en la cual sostuvo que México es de los pocos países democráticos en que los funcionarios pueden negarse a comparecer ante el Congreso, no responder a las preguntas de los legisladores o incluso mentir, sin que sean sancionados.
Presentado como vicepresidente de la Asociación Interamericana de Derecho y Economía en el evento organizado por el grupo parlamentario del PRD en el Senado, Buscaglia recomendó que haya personal del servicio civil de carrera en las comisiones legislativas, que les permita tener verdaderos asesores, especialistas y hasta órganos de investigación, que les ayuden
cuando comparece alguien como García Luna, que tienen varias denuncias en su contra y acusaciones, como la formulada en 2008 por agentes de la AFI, quienes, en una declaración jurada, dieron testimonio de que se había reunido con el narcotraficante Arturo Beltrán Leyva.
El especialista dijo que García Luna debió ser investigado por el Poder Judicial a partir de ese testimonio y de otras denuncias, entre ellas, la reciente que formuló un delincuente.
Dijo que los controles legislativos son el hazmerreír de los secretarios y no hay mecanismos eficaces para obligar a los funcionarios a explicar cómo utilizan el presupuesto y verificar sus resultados. Hay países, explicó, en que se despide a funcionarios según indicadores de eficiencia.
Es fundamental, insistió, que el Congreso cuente con dientes
y controles que sancionen la negativa de funcionarios a comparecer. Expuso que con todos los defectos en los parlamentos de Alemania y Estados Unidos, si un funcionario no quiere presentarse en comisiones, se le detiene.