Un donativo de 6 millones de pesos que se destinaría para iniciar por estos días la anunciada construcción del “Centro Cultural de Sordos –proyecto único a escala mundial”– y que había sido etiquetado en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2012, fue cancelado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), por presunto incumplimiento de requisitos administrativos.

Sin embargo, Alberto Lomnitz, director de la sociedad civil Seña y Verbo: Teatro de Sordos, creadora y gestora de ese centro, que se ubicaría en un edificio del siglo XIX por La Lagunilla, expresa en entrevista su desconcierto y pregunta a las autoridades por qué no se resolvieron a tiempo dichos impedimentos y cuál fue el destino del presupuesto asignado por la Cámara de Diputados.

Lomnitz no interpondrá denuncia ni otras acciones, pero solicita una explicación sobre la cancelación, pues se sabe de otros casos parecidos. Éste comenzó en 2011 con la solicitud y posterior aprobación del donativo para ese centro cultural.

Debido a que Seña y Verbo no está constituida fiscalmente como donataria autorizada, solicitaron la colaboración de la asociación Eje Siete: La Vialidad del Arte, con experiencia en proyectos etiquetados.

En mayo el proyecto se entregó en la Dirección de Administración de Proyectos Etiquetados 2012 del CNCA, a cargo de Jorge Ochoa, y las correcciones solicitadas se realizaron a tiempo.

En julio, Eje Siete recibió notificación de Ochoa de que arrastraba un pendiente de rendición de cuentas de un donativo de 2011. A las dos semanas Eje Siete hizo las aclaraciones pertinentes mediante oficio, pero no hubo respuesta del CNCA.

En los meses siguientes, Seña y Verbo fue informada varias veces por el Departamento de Evaluación del CNCA que el avance de los trámites dependía de que el Órgano Interno de Control liberara a Eje Siete de ese pendiente.

En septiembre, Eje Siete solicitó mediante oficio a Ochoa que diera instrucciones para agilizar la revisión que se le practicaba.

En octubre, Seña y Verbo contactó al CNCA para conocer sobre el destino del donativo. La respuesta verbal fue que el consejo tuvo un recorte presupuestal temprano y extraordinario por el final de gestión federal y que el Centro Cultural de Sordos fue uno de muchos proyectos afectados.

Hasta noviembre Ochoa informó a Eje Siete que el donativo había quedado sin efecto, debido a que no resultaba elegible como beneficiaria por el pendiente de 2011.

Hace una semana Lomnitz pudo contactar a la presidenta del CNCA, Consuelo Sáizar. Ésta le pidió tiempo y le dijo que se trabajaba en el caso. Al no recibir respuesta y al estar a punto de concluir la actual gestión, Seña y Verbo hizo público el caso.

La construcción del centro, dijo, sólo se ha pospuesto, se sigue trabajando y se presentará una segunda solicitud para el ejercicio 2013.