Se calcula que participarán 2 mil 500 elementos en la seguridad
Jueves 29 de noviembre de 2012, p. 7
El Estado Mayor Presidencial (EMP) instaló frente al Palacio Legislativo de San Lázaro (en el estacionamiento del deportivo Venustiano Carranza) su campamento de operación para garantizar que el primero de diciembre Enrique Peña Nieto asuma el Poder Ejecutivo Federal.
Hasta ayer el tránsito en el entorno de San Lázaro sigue obstaculizado por las vallas de acero instaladas por militares y agentes de la Policía Federal (PF).
El bloqueo se extiende sobre el Eje Tres Oriente (Francisco del Paso y Troncoso), donde se impide el tránsito vehicular en los carriles del lado de la Cámara de Diputados. Decenas de militares vestidos de casaca azul vigilan a los transeúntes y desvían el tránsito vehicular para desahogarlo por la calle Sidar y Rovirosa hacia a la continuación del mismo eje.
Ese sitio está bloqueado con una barda de metal resguardada por una decena de militares y policías federales. El muro también se mantiene en el entorno del Jardín de los Periodistas, uno de los espacios abiertos donde podrían concentrarse manifestantes.
El cerco sobre las calles aledañas a San Lázaro comenzó a endurecerse la tarde de ayer con la llegada de más efectivos del EMP y de la PF. Se calcula que serán desplegados más de 2 mil 500 agentes y militares en la periferia del edificio legislativo.
También en el interior del Congreso militares han comenzado a revisar los espacios y áreas de los edificios del complejo.
Este jueves por la noche la vigilancia se reforzará. Ya no podrán ingresar los casi 2 mil 500 trabajadores administrativos y sólo se permitirá el paso a diputados, asesores y periodistas.
El viernes, los estacionamientos subterráneo y adyacentes a los cuatro edificios serán sellados y no se permitirá el acceso a los automóviles que habitualmente los ocupan.
A las 20 horas de mañana el Palacio Legislativo será desalojado por la Dirección General de Resguardo de la Cámara de Diputados, en coordinación con el EMP.
Por su parte, el coordinador de la bancada del PRI, Manlio Fabio Beltrones, negó que el operativo del EMP y la PF es resultado de una iniciativa de la autoridad legislativa.
Las disposiciones de seguridad que se tomaron en las calles aledañas no tienen nada que ver con solicitud alguna de la Cámara de Diputados, y eso lo aclaró perfectamente bien el presidente Jesús Murillo. Por el contrario, hicimos saber a las autoridades la inconveniencia de este reforzamiento anticipado de seguridad, aun cuando sí les pedimos tomar nota de que tradicionalmente, a partir del jueves previo, deberían esmerarse en garantizar la celebración de la ceremonia del primero de diciembre. Sobre todo ante las versiones de que algunos movimientos han señalado que quieren rodear y secuestrar el Congreso como para que no se lleve a cabo un acto constitucional, como es la toma de protesta del presidente Enrique Peña Nieto.
–¿Hay temor en el PRI ante las posibles acciones de grupos, digamos, opositores?
–Tenemos la obligación y la responsabilidad de garantizar que la ceremonia se lleve a cabo. Para cumplir con ese propósito habremos de requerir todo el apoyo en materia de seguridad que sea necesario. De los dispositivos y la seguridad externa que se establezca son responsables tanto el gobierno federal como el del Distrito Federal. Internamente, es el presidente de la mesa directiva quien, en caso de necesitar el auxilio de la fuerza, habrá de requerirla.