En los próximos meses continuará el deterioro en la oferta de alimentos básicos por la caída en la producción de granos en el país y el incremento de la demanda de productos comestibles en naciones emergentes, advierte el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados.

En un análisis sobre la producción de básicos, el órgano cameral expuso que el crecimiento en los precios de cereales y leguminosas registrado durante las últimas semanas en el mercado nacional ocurrió por la especulación ocurrida tras las sequías en países productores como Estados Unidos, Rusia, Australia, Ucrania y la región sur de Europa.

Con estos resultados y las perspectivas de una nueva oleada de incrementos en los precios internacionales de granos básicos se podría presentar otra escalada de costos dentro del país, lo que alienta la posibilidad de un mayor deterioro del ingreso de la población por los aumetos a productos como tortilla, arroz, maíz y frijol.

El centro de estudios refirió que los incrementos de los costos en alimentos básicos tuvieron un comportamiento heterogéneo en septiembre porque el maíz, arroz, frijol y lenteja no tuvieron variación en su precio.

No obstante mientras el salario real de los consumidores decreció en 1.82 por ciento entre enero de 2007 y septiembre de 2012, los precios del arroz, maíz y frijol crecieron entre 27.49 y 55.94 por ciento entre términos reales.

Además, el sobreprecio del maíz registrado desde el año de 2010 sigue presionando al alza el costo del precio de la tortilla, ya que en septiembre se ubicó en 12, 3o pesos por kilogramo, superior en 10.98 por ciento al del mismo mes del año 2011, y 23.34 por arriba del registrado en diciembre de 2010.

El precio más alto de la tortilla se registró en Hermosillo, Sonora con 16.50 pesos por kilogramo, y el menor se localizó en la zona Metropolitana de Puebla con 8.80 pesos.

La alimentación de alimentos durante el pasado mes creció en 10.74 por ciento anual, la más alta desde febrero del año 209, cuando se ubicó en 10.52 por ciento, por lo que el índice alcanzo cinco meses seguido por arriba de la canasta básica y 18 meses consecutivos por encima de la inflación general.