En un nuevo enfrentamiento, la policía mata a otro trabajador
Sábado 6 de octubre de 2012, p. 20
Rustenburgo, 5 de octubre. La empresa Amplats, filial de Anglo American Platinum, mayor productora de platino en el mundo, despidió este viernes a 12 mil mineros que realizaban una huelga no autorizada en Rustenburgo, norte de Sudáfrica, luego de que la policía mató a uno de los paristas.
Unos 12 mil empleados decidieron no presentarse (ante los consejos disciplinarios), no asistir a las audiencias, y por lo tanto fueron despedidos en ausencia
, señala un comunicado de Amplats.
La empresa, que controla todos los pozos de la cuenca de Rustenburgo, bloqueados desde el 12 de septiembre, había amenazado claramente con despedir a los huelguistas que se negaran a comparecer ante los consejos de disciplina y había dado varios ultimatos a los trabajadores.
Los huelguistas reclaman un aumento para alcanzar un salario de mil 450 euros mensuales (16 mil rands).
Los episodios de violencia en Amplats dan testimonio de la tensión que persiste en numerosas minas sudafricanas, lo que ha generado huelgas que las tienen paralizadas desde hace casi dos meses.
El jueves en la noche, la policía mató a un minero en otro incidente en Rustenburgo, donde desde inicios de semana cinco personas han muerto en circunstancias poco claras.
Los agentes afirmaron haber utilizado gas lacrimógeno y balas de caucho para dispersar un mitin, asegurando que fueron los mineros los que comenzaron a lanzar piedras contra las fuerzas del orden.
No obstante, según testimonios recogidos entre los mineros, la policía disparó sin que hubiese la menor muestra de hostilidad de parte de los huelguistas. Una nueva marcha hasta el lugar donde la policía asesinó al minero fue convocada para este sábado.
Desde hace meses se producen huelgas en diversos sectores de Sudáfrica, entre ellos el minero.
Más de 75 mil mineros –equivalentes a 15 por ciento de la fuerza laboral, en un sector que representa 6 por ciento del producto interno bruto– han participado en huelgas no autorizadas que han elevado las tensiones con las fuerzas de seguridad y los altos ejecutivos mineros.
Tras la matanza de 34 mineros huelguistas de la mina de Marikana a manos de la policía el 16 de agosto pasado, la crisis social alcanzó un nuevo nivel de tensión, y desde hace dos semanas los transportistas también cesaron sus actividades en reclamo de una mejora salarial, lo que ya hizo llegar a 100 mil la cifra de personas en huelga en el país.