Sin prestaciones, 50% de quienes laboran de forma subordinada
Sólo 4 de cada 10 personas de más de 60 años tienen seguridad social
Lunes 1º de octubre de 2012, p. 27
Más de la tercera parte de los 10 millones 100 mil mexicanos que tienen 60 años o más aún forman parte de la población económicamente activa (PEA), pero uno de cada seis que se insertan al mercado laboral lo hacen en condiciones críticas de ocupación, es decir, trabaja menos de 35 horas a la semana por razones de mercado, y quienes laboran más tienen ingresos mensuales inferiores al salario mínimo
.
Además, la mitad de quienes laboran de forma subordinada carecen de prestaciones sociales y sólo cuatro de cada 10 tienen acceso a los servicios de salud o cuenta con un contrato de trabajo.
Tales cifras son del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), difundidas a propósito del Día Internacional de las Personas de Edad, que desde 1990 se celebra el primero de octubre, por acuerdo de la Organización de Naciones Unidas.
El Inegi explica que los sexagenarios, septuagenarios y quienes siendo de más edad aún se insertan en el mercado laboral lo hacen por voluntad y por el deseo de seguir realizándose
, pero también porque están sujetos a la necesidad de un ingreso suficiente, ya sea por falta de prestaciones sociales o porque los montos en las jubilaciones y pensiones son reducidas
.
Los adultos mayores representan 9 por ciento de la población total del país y 46.7 por ciento de ellos viven en situación de pobreza, es decir, 4 millones 200 mil mexicanos.
Quienes aún participan en el mercado laboral suman 3 millones 524 mil, es decir, 34.9 por ciento de ese grupo poblacional.
Según el instituto, hasta el segundo trimestre de 2012 el desempleo afectó sólo a 2 por ciento de mayores de 60 años, es decir, 70 mil 480 personas. Uno de cada 10 adultos mayores (10.8 por ciento) que se encontraba desocupado al momento de la entrevista dejó de buscar trabajo porque piensa que no tiene oportunidad
, asevera.
La mayoría trabaja de manera independiente (60.7 por ciento) y de ellos casi 70 por ciento lo hacen en el sector informal o en la agricultura de subsistencia. Por sectores, los servicios de protección y vigilancia, así como las fuerzas armadas, absorben a la mayor parte de trabajadores de más de 60 años de edad, al concentrar más de la cuarta parte del total (25.7 por ciento); enseguida se ubica el comercio, con 24.5 por ciento, y el trabajo agrícola (20.2 por ciento).
Además, 39 por ciento son empleados subordinados y remunerados en empresas y negocios, con condiciones laborales desfavorables: 49.6 por ciento no reciben prestaciones, sólo 39.9 por ciento tienen acceso a servicios de salud otorgados y 39.3 por ciento cuentan con contrato de trabajo
. Incluso 13.6 por ciento no reciben remuneración porque trabajan en un negocio familiar.
Los trabajos que desempeñan tampoco son calificados, ya que después de los adolescentes y jóvenes, el ingreso promedio por hora trabajada de los adultos mayores es el más bajo
, puntualiza el Inegi.
La mayor parte de ese sector que trabaja tiene entre 60 y 64 años; la mitad de quienes se encuentran en esta etapa, catalogada como prevejez
, forma parte de la PEA y la tasa sube hasta 71 por ciento en el caso de los hombres y se reduce a 32 por ciento en las mujeres.
Sólo 39.7 por ciento de quienes tienen entre 65 y 69 años son económicamente activos; de los que tienen entre 70 y 74 años la tasa baja a 29.3 por ciento, y a 17 por ciento entre los mayores de 75.
Respectos a los pensionados, sólo 25.6 por ciento del total gozan de tal derecho, pero por género el porcentaje de hombres (34.7 por ciento (duplica al de las mujeres (17.7 por ciento). Más de la mitad de los pensionados es por jubilación y la tercera parte por retiro o vejez, pero entre las mujeres 47.9 por ciento es por viudez, 31 por ciento por jubilación y sólo 14 por ciento por retiro o vejez.